かすんでいる - confuso

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"Lo siento."


¿̸̡̡̃̽̿́Q̵̫̅ṷ̴̠̦̳̱͇͈͔͂́̓̃͊͠é̵̢͈̦̙̯̣̣͈̺̓̎̀͊ͅ?̴͓̼̲̿̄̈́̀͑͋̃͑͒


"¿Qué?"

"Hoy fue un día duro." Su voz era grave, ronca y llena de dolor, acostándose a mi lado en la cama, encorvado y con las sábanas subidas hasta el cuello. Fruncí el ceño, estirándome hacia adelante para que mis dedos pudieran rozar suavemente su espalda desnuda. Se estremeció ante la sensación, alejándose de mí.

Ê̶̤̟͍̼̘̊̚s̴̘̰͕̀̀̈̽͛͘͠͝ţ̷͓̹͔̥̙͕̬̯͌̃͐̽ë̶̮̘̪̠͎̜̳̙͇̭́̅̈́̽͂ ̸̧̖͔̠̮̪͉̤̏̃̈́̆͐e̷͉̹̹̙̤̯̩̠͗̓̈́͐s̸̮̝̩̖̞͈̪̤͖͊̊ ̵̧̭͇̹͉͖̘̟̓u̵̧͇͛̈̃̿̇̕n̵̨̩̠̘̣̠̭͋̽́́͑́͊͌̕ͅo̸̤͚͙͙̚ ̷̱̻̯̠͎̑̑̕ḍ̷͒͂̍͐̚ë̷̫̀̈́̽̋̿͠ ̷̛̟͐̅̊͋͂̎̋̑̈́m̵̞̘̰̖̺̔͆ȉ̵̡̢̘̱͓̘̲̜͙̯́̒͐̈s̵̫̤̫͔̟̜̣͛͆͋̿͗͒̕ͅ ̸̢̘̗͚̈́̂̂͂̄̒́̚̚r̸̰̬͈̠̥̂̐͋́̚e̴̦̱͙̊͑̃͐̾ĉ̸̗͖͔ú̷̢̨̫̩͙̥̦̬͌͌͆̂̃̇̈́e̸̝̣͌̊̿̋ŗ̸̤̞̘̝͓͈̳̟̪̄̓͛̅̄̀̍́d̵͔͌͗̓͝ơ̶̢̢̭̳̝̩̩͖̬̜̈́͋̒͑̔͗̀͂s̷̪͐̾͆̀͆͊̾̒̑̈́ ̸̹̖̲̪͔̟̙͒̿̚͠͝f̴̳̹̪̺͒̓̓̈̅͆̓̕a̵̲͍̰͍͎͊ͅv̴̨̙͈̦͂̃ŏ̷̢̞̭̬̣̼̘̝̲͂͂̀̏̃̉r̵̲̲̰͖̪̭̺͍̒͐͆̔̌̕͘͝ͅi̸̡͍͇̜̹̗̹͎̳̎̽̎t̴̛͈̰͖̯͖͕͈͌̈́̊ǫ̴̧͚̫̤́͐̑́̎͒͝ś̵̨̹̻̟̜̄͌͒̎̅̐͆̕̕͜ ̷̡̹͎̘̳̏̓̈́̏͗͗̀͝͠d̸̢̛̪͓̙̥̟̦̬͝ȩ̶̧̖̗͎̺̄ ̸̡̧̰̫̖̣̥̥̔̑̄̌̐̀̅̏̿͘t̴͕̲͙̬̘̱̭̬̮͌̒̈̓͐̿̀͆͂͘͜ī̶̺͕̥͔͍̭͕̹͖́̇̾́͑̈̚͠

"¿Quieres hablar de eso?" Susurré suavemente, no del todo segura de qué hacer en estas situaciones. El Shota Aizawa que había llegado a amar y que conocí nunca se había derrumbado cuando se trataba de ocultar sus verdaderas emociones. Tenía la cara de póquer de un campeón, sus ojos rara vez se movían por la sorpresa, sus labios casi nunca se deslizaban en una sonrisa. 


p̴̦̐͘ó̷̖̝̭͇̈́͑͜r̴̫̤̟̝̆̇̄̈̚ ̶̛̭̹̌̓̏̈́l̶͔͈͙̣̱͇̙̃͗o̵̡͇͚̩̩̥̗͍̖̅͗͑̚̚͠ ̸͓̠̓v̵̢̛̗͎̦͔̖́̋͑͑̎͂͘u̴͇͓͚͉̦̘̩͌̀l̷̹̲̥͂̓̀͑͗͒͘͘n̶̲̭̻̻͍͋̒̃̓̓͠ͅę̷̡͚̱̹̏͒͒̇͆͐̿̔̕͝ȓ̶͇̖͖͇̜̹͇̱̻̄͑̂̔̏̈́͒͠͝ͅa̸̙̹̳̳̳͉̅́̐̑͒̂͜͝b̸̧̜̖͇͔̩̖̫́̽̆͆͛̚l̸̩̱͚͗͐̓̒͂͑̓͛̍e̴͎͊̿́̅͝͝ ̸̪̭̦́̽̊̍͒̔̚̕q̴̧͔̻̀̒͝ͅu̷̙̰̓̊̓e̸͇͉̳̻͌͆̋̆̇̄̅̃̀̚ͅ ̴̨̹̪̖̣͓̖͓͌͊̈̌̈͒͑ͅȩ̶̺̙͑̆̉̄̈́́̓͒̕͝r̵͇̯̈e̸̟̿͐́́͛̈̈́̐̕s̷̠͎̭̝̐̋̍͜͝.̴̛̟͔̹̔̉͒̓̎͂̄̒͂


"No estoy seguro." Respondió en voz baja. Dejé escapar un pequeño suspiro, deslizándome hacia adelante y envolviendo mis brazos alrededor de su torso, atrayéndolo hacia mi cuerpo. Tomé reconfortante sus manos entre las mías, esos puños cerrados que temblaban suavemente mientras dejaba escapar una mueca de dolor. Está lastimado. Presioné mi rostro contra su cuello, enterrando mi nariz en su cabello, oliendo el humo del cigarrillo y el fuerte café con canela. "¿Alguna vez pensaste en el futuro?" Preguntó, ni siquiera sonando como él mismo en ese momento. Su voz monótona habitual temblaba al hablar, el más mínimo cambio de tono al final de sus palabras.

¿̷͍̳̣̯̇͌͘͘Ể̶͕̗͌̇͊͊̊l̴͓̓͊̅͂͐̋̚͝͠ ̵̡̜̳͚̟̪̺̭̰͐̉͒f̸̛̛̩̰̼̘́̐̉̐́̈́̇͋ư̶̺̭̞̞̳͒͛̄̀̊̔̓̕̕ŗ̴̨̰̣̜̗̺̱͉̏̇̈͛̏̉͑̚͝ͅụ̷̲̱̈́͗͒̀̐t̸̡̡̮̖͙͍̞̖͍̓͋̀͌͛̇͋͘o̷̠̣̦͕̮̖̥̗͚͛́̇̈́͐̎̉ͅ?̶̼̥̝̬̗̭͙͉̺̠̔̓͗̌̓̄̕͝͝͝


"¿El futuro?"

"Nunca lo pensé." Admitió Shota, "No hasta que te conocí ti." ¿A ? Me acurruqué contra su cuerpo un poco más, mis labios besando su nuca mientras él comenzaba a respirar con facilidad. "A lo largo de mi vida nunca han habido contrastes. ¿Cómo podrían haber? Soy un héroe, un héroe rodeado de otros héroes que podrían morir en un abrir y cerrar de ojos." Sus dedos de entrelazaron con los míos, apretando mi mano hasta que sus nudillos se pusieron blancos. "Y yo-. estuve tan cerca con ese-..." Hizo una pausa, ahogándose en sus propias palabras como si incluso pensar en el evento lo enfermara. "con ese Nomu..." Su respiración se atascó en su garganta, su cuerpo temblaba suavemente al recordar el ataque del que solo había escuchado en las noticias.

Erase Her ゾごホ (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora