Te Here Ohana/Zosan

Es parte de ti

DISCLAIMER: One piece es de Goda.

ADVERTENCIAS: OCC(?), errores ortográficos, AU, capítulos cortos, idioma diferente y TRAMA LENTA, REPITO , TRAMA LENTA.

ˏˋ((🌿))

Con la piel rojiza y seca, entendí no había sido tan buena idea mantenerme tanto tiempo en el sol, si es que yo tenia la tez pálida y blanca y no como Zoro o Robin ( o todos los demás de la tribu) sin embargo, luego de burlarse un poco de mí, nadie hablo sobre como se me había comenzado a caer el cuero de la piel.

El día a día se mantuvo sereno y tranquilo, hasta que cierta noche antes de dormir, vi a Nami agarrar sus cosas (su vestido de cuando llegamos, ropa tejida con algodón, una falda de hojas, sus olvidados zapatos de taco y su lei),  mientras que Tony también hacia lo mismo.

—Ah, no te lo dije Sanji. —Viendo que estaba confundido observándolos, Nami me explicó mientras intentaba atar sus cosas en una red de pesca—. Robin nos dio una choza a parte a nosotros dos.

—¿Eh? ¿y eso porqué?

—Dijo que necesitabas algo de privacidad.

—¿De que diablos-¡todavía no le he dicho que sí! 

Con una torcida sonrisa, Nami se alzó de hombros.

—Sí pero, ustedes en algún momento se van a casar y pues según las tradiciones de aquí, debes vivir con Zoro antes.

—¿Y cómo estas tan segura de que los dejare ir así nada más?

—Porque a pesar de que me preocupo por ti, no tengo intenciones de verlos coquetear y mucho menos teniendo sex-

—Bueno bueno, ¡ya entendí!

—Piensa en positivo Sanji —dijo Tony, con una radiante sonrisa—, tu regla de caballero ya no te obliga a darle la hamaca a Nami.

—Es increíble que eso sea lo único que te preocupe...

—No, la verdad es que estoy aterrado —dijo, mientras que se mordía las uñas—, Zoro será muy duro todas las noches, ¡como doctor te aconsejo que—

—Nonono, no digas nada, no quiero escucharte.

Suspirando, Tony asintió y Nami me dio una palmada de ¿compasión? en el hombro.

—Ah, y de regalo de matrimonio, te hare una hamaca más grande, así que no te preocupes por si se cae esa.

—Nami, yo no-

—¡Adiós Sanji!

—Esperen, les digo que yo-

—Eso si, si llegó a escuchar un sonido extraño, juro que vendré a interrumpirles así que — Entrecerrando los ojos, levantó el dedo sobre sus labios—. Dormir es lo único que me mantiene bella desde que llegamos aquí ¿comprendes?, bien.

Me sentí muy intranquilo por sus palabras, ¿realmente pensaba que Zoro me haría algo esta noche? ¿antes del matrimonio? Acostándome sobre la estera, pensé por un momento en la actitud de Nami. Nosotros ya no pensábamos en el oro ni nada parecido, así que me imagino que ella estaba pensando en como ayudar a su madre cuando regresara...

¿Regresar?, no tenia las ganas de pensar en eso, pero si estaba seguro que Tony y Nami lo estaban haciendo, y que aunque amaran estar aquí, algún día se irían. ¿Cuándo? Ni idea, pero estoy seguro de que el tiempo iba a responder nuestras dudas.

—Oye Sanji. —Asomó de pronto Nami, con una sutil sonrisa—. Ahí viene tu marido, así que ponte en guardia.

—¡T-Todavía no somos nada!