𝕔𝕠𝕟 𝕦𝕟𝕒 𝕤𝕠𝕟𝕣𝕚𝕤𝕒 [𝐍𝐚𝐡𝐨𝐲𝐚 𝐊𝐚𝐰𝐚𝐭𝐚 𝐱 𝐎𝐜]

Capítulo 7

| Nueva amistad |

Habíamos llegado temprano a la escuela, no había mucha gente, llegar así de temprano con Nahoya y Souta en verdad se sentía muy cómodo, estaba algo nerviosa pero al saber que ya no estaba ninguna de las personas que me hacían sentir incómoda me dejaba mucho más tranquila.

Al entrar comenzamos a avanzar por los pasillos, nos dirigíamos al gimnasio.

-solo voy al gimnasio cuando hay partidos o hay que entrenar. -hablé mientras íbamos de camino.

-te enseñaré algo divertido. -Nahoya me sonrió.

-¿que cosa?

-ya lo veras.

Seguimos avanzando hasta que finalmente llegamos a las grandes puertas que daban al gimnasio, las abrimos sin pensarlo dos veces y entramos.

-¡está tan vacío! -se escuchó eco- ¡eco! -grité.

Nahoya rió y comenzó a correr por en medio del gran lugar mientras dejaba caer su mochila.

-¿¡dónde va!? -le pregunté a Souta.

-solo deja tu mochila aquí y prepárate. -habló Souta con el ceño fruncido mientras se quitaba su mochila.

Imité su acto dejando la mía tirada en el suelo al igual que él. Al mirar al frente pudimos ver como Nahoya estaba en la sección de los balones, sacó uno para jugar baloncesto y se dió vuelta con una sonrisa malvada en su rostro.

Inmediatamente ahogue un grito cuando lanzó la pelota hacia nosotros, Souta y yo la esquivamos, pero corrí detrás de ella para tomarla, Nahoya siguió lanzandolas hasta que dio vuelta todo el canasto que las guardaba.

-¡van a castigarnos! -hablé preocupada con el balón en mi mano.

-¡al diablo! ¡atrapala! -Nahoya me lanzó otro balón.

Sonreí mientras lo esquivaba y comenzaba a correr hacia él lanzándole el que tenía en mi mano, el cual esquivó.

-¡toma! -gritó esta vez Souta lanzandole otro balón el cual también esquivó.

Nahoya le lanzó otro balón a Souta y comenzaron una pequeña batalla de balones, los cuales podían esquivar.

Tomé uno de los que estaba en el suelo y lo lancé hacia Nahoya, se dió cuenta a tiempo y pudo esquivarlo, pero no el de Souta el cual impactó en su estómago, una sonrisa malvada se formó junto con una pequeña vena de molestia a un lado de su cabeza mientras gruñia con una sonrisa vengativa y tomaba uno de los balones.

-¡muere! -se lo lanzó a Souta.

Pero Souta en cambio lanzó otro balón al mismo tiempo haciendo que los balones chocarán entre sí y uno de ellos fue directo a mi rostro.

-¡ah! -grité, pero no pude esquivarlo a tiempo.

Caí sentada hacía atrás luego de sentir aquel impacto en mi rostro, cerrando los ojos por un momento debido al dolor que se comenzaba a formar en mi nariz.

-¡mierda! -oí a Nahoya.

-¡ay no! -escuché a Souta.