#Veronica
Me coloqué la pelotita de mi piercing de nariz y ya estaba lista, tomé mi cartera y eché mi billetera y celular.
El Ian me estaba esperando abajo, creí que yo iría con el Mati ya que el me invitó al carrete, pero el se fue con la Paz diciendo que tenían que comprar otras cosas antes de ir.
baje y encontré al Ian recostado en el sillón viendo "zona latina" y la canción "el perdedor" de enrique iglesias sonando.
me miro de arriba abajo y silbó ─ Siempre tan bonita tu ─fue inevitable no sonrojarme.
─ lo dice el minito que va a hacer babear a las minas del carrete ─le dije, encontré que mi alago fue muy malo, pero tampoco es que supiera mucho de eso.
sonrió y apago la tele, se levanto del sillón y acomodo su polera. Con esa polera se le veían mucho mejor sus tatuajes y las venas marcadas.
tomo sus llaves y su celular del arrimo en la entrada, vi como llamaba a su mamá mientras me apuntaba la salida.
─ hola mamá...si, vamos saliendo...se fue con la paz...¿donde te vas a quedar?...ah ya... nose la verdad...si, yo cuido a la Coca...
me pasó las llaves del portón para que lo cerrara mientras el encendía el auto.
una vez listo, me subí al auto y seguía en llamada con la tía Lorena.─ cuidado si, no tomes mucho y pásale las llaves del auto a la tía Rita...también te amo...chao...
sonreí al momento de escuchar a la tía mandarme saludos y decirle que no anduviera mirando a las "niñitas" que fue más chistoso sabiendo que el Ian va exactamente a comerse a alguien en los carretes.
en el camino el Ian saco de su pantalón un preservativo.
─ por si no hay gorrito ─lo mire feo recibiendo el paquete ─ no me mires así, a no ser que quieras tener un feto nueve meses ahí y comprar pañales en vez de condones me lo devuelves.
sonrió satisfactoriamente cuando lo guardé en mi cartera.
iba con una falda tableada negra con unas pantis por el frío, mis zapatillas negras y un crop top ajustado del mismo color. No se me ocurrió llevar una chaqueta y me arrepentía bastante porque tenía mucho frío.
En un semáforo el Ian busco algo en la parte de atrás y vi una chaqueta que usaba muchas veces, era como un cortavientos blanco con azul y combinaba con mi delineado azul.
─ gracias ─le agradecí colocándomelo al instante, era bastante calentito.
─ oye Coca, va a ir el cuico de la esquina y se que hablamos de esto, pero sería bueno que te fijes en todos menos en el en este carrete.
─ ya, ¿y porque tendría que hacerlo?
me miro un momento estacionando el auto cerca de la casa, adelante estaba una mina comiéndose con un mino en el capó del auto.
─ porque no vino solo.
lo mire con el ceño fruncido y apunto hacia adelante.
vi a la mina bajándose del capo y al loco dándose la vuelta, era el Agustín con una sonrisa en la cara.
puta vida.
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me tire al cuico
Teen FictionLa regla sagrada de las Ortega era nunca jamás en la vida meterse con un cuico, lo que la Coca no logró hacer por que... ¡se tiro al cuico de la esquina! (bajo edición en febrero)