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21: UNA CONVERSACIÓN INTERESANTE

—Está demasiado frío, no me gusta

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—Está demasiado frío, no me gusta.

—No seas exagerado.

—Prefiero las cosas calientes, no esto... ¿Por qué me obligas a comer esta cosa a mediados de enero? ¿Acaso estás loca?

—Porque me dijiste que nunca te habías comido uno. Eres tan raro —pongo mis ojos en blanco—. Aunque ahora entiendo porqué.

—Tú eres rara, ¿qué clase de persona prefiere el frío que el calor?

—Una persona que está acostumbrada a vivir en ambientes fríos.

—Bueno, pues yo vengo del Infierno, y como ya bien sabes, ahí lo único que hay es fuego y almas por doquier.

—Eso suena espeluznante.

—Es bonito.

—No es bonito ver las almas de las personas muertas, Calix —se encoge de hombros, llevándose una cucharada de helado a la boca—. Me gustaría ir a Grecia.

—¿Por qué?

—Tengo curiosidad por saber cómo es el Olimpo.

—Aburrido, cutre y vomitivo —entrecierro los ojos.

—¿Eres igual de negativo para todo?

—Si crees que con ir a Grecia vas a conseguir ver el Olimpo, estás equivocada. Es un lugar prácticamente inaccesible.

—Bueno, pero tú puedes llevarme, ¿no?

—No, allí no aceptan mortales. ¿Puedes ser más discreta? Estamos en una cafetería rodeados de gente.

—Que probablemente piensa que estamos locos, nadie sospechará nada, tranquilo.

—Siempre te aprovechas de mis habilidades.

—Pero las aprovecho para hacer cosas buenas, no como tú. Tú obligas a la gente a que se pelee. Esta semana has provocado tres peleas.

—En mi defensa diré que los culpables de la pelea ya estaban enfadados, yo solo les he dado un empujón. Además, nunca hay ningún conflicto, que pueblo más aburrido.

—Siempre puedes irte —sonrío—. Te puedes mudar con mamá y conmigo a Idaho, le han dado el trabajo.

—¿En serio? —Pregunta sorprendido. Asiento con la cabeza— ¿Entonces... Se vais?

—Cuando termine el segundo trimestre nos mudaremos, hasta entonces, han conseguido aplazar el contrato de mamá un par de meses.

—Puedo buscar una casa al lado de la tuya.

—No tienes porqué vivir a mi lado, solo...

—Me gusta vivir a tu lado, y trepar por tu árbol para subirme a tu tejado y colarme por tu ventana. Por favor, dime que la casa donde vayas a mudarte también tiene un tejado con poca inclinación, me gusta tumbarme ahí y hablar contigo.

CALIX #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora