Seguíamos esperando algunas personas, ¿Qué juego necesita tantas personas?, ¿acaso será esto una masacre?.
- ¿Cuántos faltan? - Nunca habían esperado tanto en un juego, ni siquiera en los números mas altos dentro de las cartas ya encontradas teníamos que esperar tanto. - ¿Cuál es la importancia de tantos jugadores?.
- No se, solo cierra tu boca - No soportabas al chico, ya llevaba como unos treinta minutos preguntando lo mismo. - Eres odioso, el único que no molesta es Samura.
- El no habla mucho, ¿Qué esperabas?.
Pasaron unos cuantos minutos para que empezara el juego, al final tenían que ser dieciséis jugadores en total, algo que te causo curiosidad era saber como porque cada uno de ustedes tenían nombre de piezas de ajedrez.
Se adentraron a la casa de dos pisos, bastante elegante, estabas segura de que era de un ricachón. Una vez dentro se les ordeno que pasaran al jardín, que por si no fuera suficiente que la casa fuera enorme, el jardín no tenia donde acabar.
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Todos pasaron al enorme jardín, donde había dos pantalla enormes frente a ustedes cada una con un tiempo.
- Esto es una estupidez, ¿Quién de aquí sabe jugar ajedrez?.
- Yo, pero no creo que sea un ajedrez cualquiera - Estabas segura de no eran las mismas reglas del ajedrez común. - ¿Qué tanto podemos confiar en las reglas del juego?.
- Es fácil, las torres van hasta atrás en las esquinas - Observaste a quienes tenían las torres como se ponían en su posición. - El caballo se posiciona del lado de las torres - Todo iba de maravilla, sabias como posicionarlos. - los alfiles van del lado de los caballos - Les darías coordenadas pero seria mucho mas complicado. - Ahora todos los peones frente a los demás.
