Lanza La Moneda [Traducción]

53: Altercado.

Justo antes de la cena, Kakashi les dijo: "Nos vamos mañana por la noche".

    Sería su quinto y último día en la isla, y honestamente Sakura no podía esperar a que terminara. Quería irse a casa, quería dejar ese pueblo lúgubre con su gente lúgubre, quería volver a estar a salvo, aliviada del miedo que no la dejaba descansar desde que habían sido atacados en el camino. Quería que las cosas volvieran a la normalidad.

    Kakashi no había dicho nada sobre el hecho de que no habían tenido noticias de Konoha en absoluto. Si no son copias de seguridad, al menos deberían haber recibido una respuesta de algún tipo a estas alturas. Trató de tranquilizarse con la idea de que él les diría si había motivo de preocupación, incluso si la experiencia había demostrado que tal vez no lo haría.

      —¿Nos vamos a ir? ¿Solo así?—Sasuke acusó.

      —Sí— Kakashi respondió con firmeza. No fue objeto de debate. No pudieron ayudar a esta gente.

    Volvieron a cenar con Tazuna y su familia. Con cada comida, Sakura se sentía cada vez más culpable por la comida que devoraba, exhausta y hambrienta por su entrenamiento intensivo. Tsunami les aseguró que estaba bien, y era cierto que su familia estaba mejor que la mayoría de los demás, pero tener dinero no significaba nada cuando simplemente no había comida para comprar.

    Si la mujer estaba de acuerdo, no era el caso de su hijo, quien fulminó con la mirada a Naruto y Sasuke llenando sus tazones de nuevo. Lo habían visto muy poco en los últimos días; si podía evitarlo, evitaba estar en la misma habitación que ellos. Tazuna les había hablado del padre adoptivo del niño, de su brutal muerte y de cómo había matado lo poco que le quedaba de coraje a la isla. ¿Qué podrían hacer si el mejor de ellos fuera eliminado tan fácilmente? Todos habían dejado de intentarlo después de eso.

    Excepto los que trabajan en el puente.

      —Vamos, date prisa, quiero entrenar un poco más— Dijo Naruto, con la boca llena. Sakura chasqueó su lengua hacia él y sus terribles modales y obtuvo una sonrisa descarada en respuesta.