Capítulo 24

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Después de la noche salvaje que tuve con mi prometido, volví a la clínica donde una Andrea y Hanna me saludaron de forma cariñosa, también supe que fueron al hospital a verme cuando estuve ahí aunque no pidieron verme agradecía la muestra de cariño y preocupación por mí.

Hanna lo hacía muy bien siendo ya una veterinaria recibida. Había obtenido su título con mucho esfuerzo y sabía que amaba realmente su profesión. Ahora quería especializarse en lo mismo que papá y yo eramos, animales de rancho, habían pocos veterinarios que solo vieran gatos y perros y otros animales.

Llegaba a mi oficina y revisé los correos electrónicos que habían enviado, muchas veces eran cursos o boletines de información veterinaria. Dos de ellos me llamó la atención.

El primero era de la sociedad que tenía con Jack Hyde en la clínica que teníamos en Houston, los archivos debía descargarlos y enviarlos junto a mi firma al notario que se adjuntaba el nombre y correo electrónico, de esto hacia una semana. Mierda¡, no lo había visto y ya habían pasado 4 días adicionales de la misma semana. Descargue el archivo y las hojas salieron impresas, de todas maneras lo leería, no se debía de firmar sin leer lo que era legal, palabras de papá.

El otro era una oferta de trabajo para ir a Dallas de un tal Michael Lighton, tenía un rancho de 1.500 hectáreas llamado Wildcatter Ranch está ubicado en North Texas Hill Country, en el kilómetro 16. Me enviaba fotos por si me interesaba ya que buscaba un buen veterinario y le había llegado la información que en Marble Falls habían dos veterinarios que veían animales de crías de caballos y ganadero. Silbe por lo que me ofrecían, era 3 veces lo que alguna vez gané en Houston y en la clínica de papá. Tentador pero yo iba a hacer mi vida en el pueblo junto a Christian y para estar unidos otra vez en la familia.

Estaba leyendo lo que debía firmar cuando Andrea me avisó que Hanna le habían pedido ir a ver una perrita que iba a parir en el centro y que me quedaba solo con ella pero que había llegado un paciente. Fui hacia la sala de revisión y me encontré nada más y nada menos que a Emily Lincoln, la madre de Elena.

-Buenas tardes señora Lincoln- ella me miró y vi que tenía a una perrito de raza pequeña.

-Buenas tardes doctora Steele, veo que aún me recuerda, soy la madre de....- se calló y yo solo me puse en mi traje de veterinaria.

-Lo sé, como se llama su mascota? Y que edad tiene?, además de que veo que no es tan joven- a ella se le aguaron los ojos.

-Era de mi hija, su nombre es Corin, tiene 10 años en la familia-

-Ya veo, ella es un Bichón Frisé, su expectativa de vida es de 12 a 15 años, dependiendo de los cuidados y si tiene todas sus vacunas al día.....que le ha visto últimamente?-

-No juega como antes, creo que se cansa y a veces se desorienta...la amo porque es lo único que tengo de mi hija....- puse el estestoscopio en su corazón y se escuchaba lento.

-Hummm, su corazon tiene lenta pulsación....veamos....mira a mis ojos pequeña......tu nariz está un poco reseca....creo que tiene ductus arterioso persistente o patent ductus arteriosus - PDA y puede ir acompañado de sintomatología asociada....disnea, apatía, intolerancia a la actividad, síncopes de repetición...-

-Es grave¡¡¡, ohhhh Dios doctora Steele por favor....-

-Tranquila Sra. Lincoln....- ella me interrumpió.

-Emily por favor.....dime así, me recuerdas a mí hija cuando aún......- no quería siquiera saber en que me parecía a Elena¡ así que yo la corté.

-Bien, Emily, haré los exámenes de rigor y la dejaremos internada a Corin, además la voy a monitorear y de ser la patología que le he dicho, le haremos la operación por catéter, es menos invasiva y para su edad, mucho mejor.....-

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