La nueva Ochako

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El primer cambio que Katsuki notó en Ochako, es que esta, se había salido del coro de la iglesia, pues las sesiones de estudio ahora las hacían en el horario en el que ella asistía. Y cuando Bakugou le preguntó, simplemente esta le había contestado: "me salí del coro para aprovechar mi tiempo un poco mejor". El segundo cambio fue, que ahora Ochako pasaba más tiempo con las chicas de la clase, antes solo hablaba con Tsuyu y un poco con Momo. Ahora, le hablaba hasta a Mina, una chica algo problemática según la antigua Ochako. Y parecía que, Mina le estaba enseñando muchas cosas, pues ahora Ochako había comenzado a usar maquillaje y a peinarse diferente cada día. Realmente no podía decir si le gustaba más la nueva o antigua Ochako.

Kirishima le había pedido acompañarlo atrás del invernadero de la escuela, diciendo que era realmente importante lo que le iba a enseñar, obviamente Katsuki no quería perder el tiempo en los juegos tontos de Kirishima, pero, Kirishima era una buena persona y rápidamente se había ganado el respeto de Katsuki hasta tal grado de considerarlo su amigo. Entonces, lo acompañó para que lo dejara de molestar.

Y resulta que, detrás de los invernaderos, el club de lucha y algunos de sus compañeros de clase habían hecho una pequeña celebración en contra de las reglas de la escuela, pues, llevaban alcohol.

—Felicidades por tu primer lugar, bro —dijo Kirishima con una sonrisa de oreja a oreja—. La idea fue de Denki.

Al principio, Katsuki se iba a ir pues pasaba su hora de dormir, pero al verla decidió quedarse. Nunca creyó ver a una chica como Ochako vestida así. Llevaba un vestido corto ceñido al cuerpo de color morado con escote, unos tacones negros, su cabello estaba recogido en un moño que la hacía ver más segura de sí misma y un maquillaje que gritaba "soy una perra".

Con el bulto entre sus pantalones algo duro se sentó en un rincón junto a Kirishima, el cual ya le había pasado una cerveza. Era la primera vez que Bakugou tomaba...

— ¿Nadie se va a dar cuenta de que estamos bebiendo alcohol? —preguntó.

—Nah, el jardinero es buena onda, ¿quién crees que nos hizo el paro de comprarla? —dijo Sero, después de un trago a la lata que sostenía en su mano.

Durante toda la fiesta, Bakugou se la pasó sentado bebiendo de a poco para irse acostumbrando. Se sorprendió como Deku también había aceptado una, aunque, no parecía que su cuerpo tuviera mucho aguante al alcohol pues, después de dos cervezas, el chico ya no se encontraba tan bien. Al contrario de Ochako, la chica había aprendido rápido de Mina; pues, estaba bebiendo como un demonio.

Conforme transcurría la noche las cosas avanzaban de forma interesante; Ochako se había acercado a Deku, y esta le decía algo. Katsuki veía con la mandíbula apretada como Ochako se le acercaba poco a poco y el chico no apartaba la vista de sus senos. Claro, no es como que él tuviera derecho alguno en los senos de Ochako, pero, ambos estaban muy borrachos y podría ocurrir algo de lo que posiblemente se arrepentirían después.

—Bro, vamos a jugar a la botella, ¿te nos unes? —le preguntó Kirishima. Iba a negarse, pero luego pensó que quizá podría evitar que ocurriera una tragedia, así que aceptó—. ¿Ven, chicos? ¿Qué les dije? ¡Bakugou no es tan aguafiestas como parece!

Sentados en círculos, la botella giraba y giraba; primero le tocó a Mina, luego a Kirishima, Denki, Sero... Por supuesto, los más valientes para este tipo de juegos. Luego, le tocó a Tsuyu, Mineta, Jiro, Momo... Los retos subían de tono cada vez más, así como las verdades que eran descubiertas. Todos estaban muy borrachos, a excepción de Bakugou, que aún tenía la cerveza con la que había empezado; les había hecho creer a todos que llevaba varias para que no lo jodieran. La cosa se puso atrevida cuando el idiota de Mineta comenzó a poner retos más calientes, con la esperanza de que a él le pusieran algo pervertido con una chica; por supuesto, no sucedió.

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