In My Head - [Hyunin] [✓]

XXXIX [FINAL]

Jeongin apoyó su espalda en el galpón que daba ingreso al búnker, mirando el sol en el cielo y sintiendo el calor del mismo en su piel incluso si el aire estaba frío. Sintió su cabello ser impulsado hacia un costado a causa del viento y también sintió como el verano estaba comenzando y el invierno se fundía en su propio final. Sintió como su corazón latía, como en el mismo barrio donde se encontraba había aún cenizas en el aire de un fuego pasado y sintió cómo su respiración se escuchaba más allá de todo el ruido que su cabeza solía hacer en momentos de tranquilidad.

Cerró sus ojos, haciendo una búsqueda en el mundo y deteniéndose en cada conexión que tenía y fallando como en cada intento. Sus labios dejaron escapar un suspiro cansado antes de intentarlo de nuevo. Al final, su cabeza terminó ladeándose para rendirse en su propósito. Relamió sus labios y tomando una piedra del suelo, la lanzó lo más lejos que pudo, directo al sol y esperando no haber golpeado nada importante en el techo de la casa en la que cayó.

Su mente volvió a sumirse en un silencio del que comenzaba a acostumbrarse, pero que odiaba de sobremanera. En el momento exacto que un cuerpo tomaba lugar a su lado y ese silencio que estaba sintiendo el menor, se llenara por el ruido que hacía la mente de Chris a su lado.

— ¿Lo estabas buscando? —Preguntó el mayor, apoyando su espalda en el mismo galpón y mirando el mismo cielo que el menor.

—Sí. —Afirmó Jeongin, sabiendo que todos esos días que habían estado pasando se había esmerado en buscar la mente de Hyunjin para poder comunicarse con él. También había intentado ver a través de sus ojos pero no había caso, no quedaba nada más que vacío en su mente. —Nada. No existe.

—El estará bien. Antes de ser un Aurum fue un solitario asesino, sabrá cuidarse hasta que nosotros logremos encontrarlo. Sin Jun, es solo un robot apagado. —Afirmó Chris, buscando la mirada del menor. Jeongin asintió, tratando de creer esas palabras.

—Está programado para detectar y matar Aurum y Ferrum. Es peligroso, Chris. —Atacó el menor, mirando a su compañero a su lado y sintiendo un cierto temor a que Hyunjin y Minho estén sueltos por el mundo.

—Te aseguro que no le harán daño a nadie, los encontraremos antes. —Afirmó el mayor, demostrando seguridad en su voz que Jeongin parecía haber perdido en el camino.

— ¿Realmente crees que lo lograremos, Chris? —Preguntó el menor, mirando por encima de su hombro al mayor.

— ¿Que pregunta es esa, Innie? —Se quejó el mayor, sonriendo y volviendo la vista al frente. —Hasta me ofende que tengas miedo.

—De hecho sí, tengo demasiado miedo. —Admitió, bajando la mirada al suelo y siendo incapaz de guardarle aquello a Chris.

— ¿Que es el miedo exactamente, Jeongin?

— ¿Un sentimiento?

—Exacto. ¿Y qué tiene que pasar para que tengas miedo de algo? —Jeongin negó con la cabeza, demostrando no saber la respuesta. Chris la respondió. —Tienes que estar vivo, Jeongin. Tienes que tener algo que perder, tienes que tener un objetivo claro. Nacer da miedo, morir da miedo, pero nadie se da cuenta hasta que sucede. Tener miedo es lo más humano que vas a encontrar en el mundo, cuando lo sientas así de profundo en tu pecho, piensa que es porque aún estás respirando. Aún tu batalla no acabó y el sentimiento va a seguir allí hasta la última inhalación que hagas.

Jeongin alzó la vista y la colocó exclusivamente en el mayor. El sol le daba suavemente en la piel y sus oscuros ojos brillaban en motivación, podría estar destruyéndose a sí mismo con sus pensamientos, pero a los demás siempre los ayudaría a mantenerse de pie. Un líder, eso era para Jeongin.