ALEJANDRO LOMBARDY:

CAP:23 "Especial".

Hace años atrás lombardi había quedado flecha do por una mujer extremada mente hermosa, ella era especial, era amable, cariñosa, humilde y siempre sonreía a pesar de las situaciones desastrosas que había vivido en su vida, esa pelirroja de nombre lorena desde muy temprana edad perdió a sus padres en un accidente, más tarde su hermana se suicido enfrente de ella, sin embargo nunca había dejado que eso la hundiera en la miseria siempre mostraba positividad y una sonrisa para alegrar le la vida a todos, ellos se habían conocido por casualidad de la vida, ambos estudiaban en la misma universidad pero distintas carreras, mientras el se preparaba para poder crear su propio negocio, ella se preparaba para ser la mejor modelo.
Los dos habían conectado de maravillas tenían muchas cosas en común, se habían enamorado profundamente, a un que eso era lo que creían.
En su ultimo año de universidad, los dos habían jurado nunca traicionar se ni alejarse, los dos empezarían desde cero, y fundaría un imperio, que manejarían los dos, el futuro que ellos tenían planeado era prospero y maravilloso.

Los primeros meses de su amor incondicional, habían sido perfectos, pero pronto ella empezó a crecer en el mundo del modelaje y farándula, y alejandro apenas iniciaba con sus proyectos, todo parecía imposible de que el sacara un negocio adelante, y eso la exaspero, cuando se dio cuenta de que el venia de una familia  adinerada, le exigió pedir ayuda a sus superiores, pero el se negó, pues quería valerse por si mismo y no tener algo por su familia, por el momento ella acepto, pero no quedo contenta.era su 3 año de aniversario como novios, el la invito a una cena para celebrar, le tenía una sorpresa, quería contarle todo lo que había logrado, su empresa había por fin salido de zona de riesgo, estaba avanzando y se había ganado la confianza de muchos socios.
Pero se lo contaría cuando su empresa creciera más quería disfrutar de sus logros juntos.
Esa noche le pediría que se casaran, ella era la mujer perfecta, el amor de su vida, la mujer con la que quería pasar el resto de su existencia. Ella era la mujer que miraba como la madre de sus hijos.

Esa noche cenaron y miraron las estrellas juntos, como dos enamorados felices. Y pronto el se inco pidiendo su mano en matrimonio, ella acepto feliz pues decía amarlo con todo su corazón.

La boda que el le podía propiciar en ese momento era sencilla nada de lujos caros. Ella dijo estar bien con eso, pero pronto eso cambiaría de idea.
La boda se celebraría en 3 meses, todo estaba preparado ella tenía su vestido de novia h el su traje, pero en semanas ella cambio con el, no era la mima. No dejaba que el la tocara, se enojaba y buscaba discutir por todos, pensando el que era por la presión de la boda, pasaba más tiempo trabajando así no discutía con ella.
Para el todo estaba bien, su noviazgo y compromiso estaba de maravillas, pero todo no era así.

La había presentado a su familia todos la habían aceptado, como no aceptarla si era un amor de mujer, su abuelo incluso la consideraba su nieta preferida.
El dia de la boda llego, los invitados estaban todos reunidos en la iglesia donde ellos se causarían, estaba nervioso, pero feliz, mientras esperaba al amor de su vida en otra parte pasaban otras cosas.

La dulce lorena, se miraba en el espejo con su vestido de novia, mientras pensaba que hacer, se había estado acostando con otro hombre, no sabia como había llegado a ese punto pero lo había hecho, amaba a su novio pero su amante le proporcionaba joyas y lujos, que podía hacer. Se iba a casar con el hombre que amaba pero pensaba en la propuesta que la noche atrás le había hecho su amante.

O elegía el amor, o la gloria de ser una dama de sociedad, de vivir una vida llena de lujos, y crecer en su carrera.
Su novio le ofrecía una boda sencilla y un futuro de amor pero no de lujos. Mientras que su amante le ofrecía una boda de ensueño, por todo lo alto digno de una reina, lo que ella se merecía y una vida de lujo como ella quería.
Se llevaban bien en la cama por que necesitaría amor, con esa decisión pensó que si tenía la barriga llena, los bolsillos llenos y placer carnal, todo estaría de maravillas.