Ya pensaré en algo [Terminado]

III

-¿No recuerdas...?
- No tengo idea de que me esta hablando.
-Claro...-Dijo la chica sentándose de nuevo en la silla- Una semana antes de que se incendiara tu mansión, Vine con mi padre, él y tu padre hablaron de algo de padres o algo así mientras tu huías de mi, te escondías detrás de tu perro...¿Ya recuerdas?
l-...No.
-Ahh...corrí detras de ti hasta que nos perdimos en el bosque y encontramos un cuervo negro, luego...
Ciel- Si, "prometo no volver a huir de ti", ¿No?
-si...No sueles cumplir tus promesas, o ¿si?-Dijo la chica en un tono burlón.
-Bueno... Eras muy diferente en por lo menos diez sentidos.
-Puff, ¿Eso como afectaría una promesa.
- Oye! ¿Como...?
- Boch-chan, Ya es hora del té.
- Bien, vamos ___, aprenderás a tomar el té.

-Esta bien- Dijo antes de soltar un suspiro.

- Por aquí- Indicó al tiempo que abría una puerta puerta.
El jardín, era bastante grande y estaba lleno de flores blancas, las favoritas de Ciel.
Ciel Caminó hacia una de las sillas que estaban alrededor de la mesa haciéndola hacia atrás, mirando a ___.
- Tome asiento, Lady.
-Claro.- Caminó hacia la silla que Ciel había destinado para ella.
- ¿Tu padre es el señor Middleford?-Preguntó Ciel tomando asiento. 
-si -Contestó después de un largo suspiro.
- ahh...¿Tu eres ___ Middleford?
- y tu eres Ciel Phantomhive.
- Comencemos, Sebastian, sirve el té.-Ordenó el chico con los ojos cerrados y los brazos cruzados.
Sebastian- El té de hoy es Blue as death, acompañado de muffin's terciopelo, espero sea de su agrado. - Sirvió el té y los muffin's, después volvió a la mesa donde estaba.
-Gracias.
- ... Primero, debes bajar los codos de la mesa, eso es de muy mal gusto.
-Esta bien. -Dijo bajando los codos de la mesa.
-Ahora, no lo termines todo..........
La chica dejó de escuchar, un gato se había recostado en su regaso, y ella lo estaba acarisiando.
Ciel- otra... vez...-Dijo entre estornudo y estornudo.
-¡Le aseguro que esta vez no fui yo!-exclamó el mayordomo.
-¿Que sucede?- Preguntó la chica algo confundida.
- Debe haber un gato por aquí- aseguro entré estornudo y estornudo.
-¿Les tienes alergia?
- Si!
-ohh...-empujó suavemente a el felino haciendo que bajara de su regazo.