Ya pensaré en algo [Terminado]

XXIV

- Por que ya nos tenemos que ir.- dijo el chico poniéndose en pie.
- Mentiroso! - gritó la chica dándole la espalda.
- Puff si no quieres venir no vengas. -entonces cambió su dirección hacia donde estaba el mayordomo.- Vamos, Sebastian.
- ¿Enserio va a dejar a una persona tan importante para usted en un lugar como este? - Le preguntó en voz baja mientras le ponía una manta encima.
- Si no quiere venir que se quede.
- Ahhh... ustedes los humanos si que son raros.
- ah, esta bien, tráela.
-Claro. - Con estas palabras se dirigió a donde se encontraba la chica. aunque estaba sentada en la orilla se estaba divirtiendo, tomaba caracolas vacías y las ponía una a lado de la otra como en una especie de formación. - Señorita, nos tenemos que ir.
- No quiero, es muy bonito aquí.
- Pero, boch-chan se pondrá triste.
- ¿Que con ese idiota? - pregunto la chica.
Sebastian- Pero, él es importante para usted, ¿no es así?
- No, ademas, aquí es muy bonito. -respondió la chica apretando una caracola en su mano.
- si se queda no lo va poder hacer sufrir.
- No me interesa. - dijo apretando aun más la caracola.
- Pero a usted le gusta Boch-chan, ¿cierto?
- ...Aunque me guste... nada va a cambiar, él es malo conmigo... - respondió está apretando tanto la caracola que la llegó a romper y se cortó con sus fragmentos.
- Él es malo con todos, así es y así se queda.
- Ya veo...