Capítulo 35

174 19 0
                                    

+18

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

+18...

Mi cabeza me está matando, siento tambores en los oídos y aún no logro despertar del todo. El alcohol hizo sus efectos en esta madrugada.

Abro mis ojos a duras penas, estirando mis brazos para comenzar lo que creo es el nuevo día.

Toco piel, subo y un rostro, pero que carajos. Me asombro y salgo de mi cama como si de lava se tratará. Dante está aquí, acostado, conmigo. Inspecciono mi cuerpo, dejando alivio en mi pensar cuando puedo ver que tengo la ropa de anoche aún puesta, respiro profundo y procurando no despertarlo voy a tomar una ducha.

Realmente dormimos, no hubo nada más que eso. Es rara la sensación que empezó a invadirme al darme cuenta que no se aprovechó de mi estado. Tomo esto como una muestra de respeto de su parte, aunque realmente, no me pregunten porque, no me hubiera molestado algo más.

*abrió link Akira*
Akira: Es la Luna llena Dani
Dania: Qué tiene?
Akira: Sacará a flote nuestros instintos...
*cerré el link*

Mi loba acabó de decirme que estaré así por la Luna. Necesito alejarme de él lo más posible, aunque su rostro viene a mi mente y la manera en que me cargo. A pesar de haber estado ebria aún puedo sentir sus manos pegadas a mis caderas, su aroma...

Ay Dania concéntrate, comienzo a sentir fuego en mi cuerpo, no puedo controlar el sudor que empieza a salir de mis poros y el picor que está ahora en mi entrepierna. Necesito ducharme ya.

Me desnudo rápidamente, pongo el agua prácticamente congelada y sumerjo mi cuerpo en ella. Juraría que por poco y salió vapor cuando entre. Pensar que en estos momentos está en mi cama, dormido, como un angelito, me vuela la cien. Quiero sacar mis deseos del cuerpo, no entiendo como me puede afectar tanto algo tan banal como esto.

Sin darme cuenta estoy tocando mis pechos, tengo cierta vergüenza por mis acciones pero al mismo tiempo me da cierto alivio hacerlo. Pongo una mano en mi boca para reprimir los gemidos y con la otra comienzo a explorar un poco mi vientre. Me siento apenada de lo que estoy por hacer pero creo que es la única manera de apagar el fuego.

Toco mi parte íntima de forma suave para bajar un poco los niveles, pero es como si necesitará aún más. Necesito aún más, y en eso siento otra mano que no me pertenece frenar la mía.

Dante: Necesitas ayuda pequeña?

No entiendo como es que su voz suena más gruesa de lo habitual, pero fue melodía para mis oídos.

Dania: Dante, por favor...
Dante: Te ayudaré a bajar el fuego pero no me voy a aprovechar de ti... (susurró a mi oído)
Dania: Y tu?
Dante: Puedo controlarlo...

Sacó por momentos sus manos y yo quedé sentada dentro de la bañera llena de agua, cubriendo por milímetros hasta encima de mis pechos.

Veo como se quitó la ropa, quedando sólo en bóxer y aspiro profundo el aroma que deja salir de su cuerpo. Siento mis mejillas arder, cada parte de mi piel lo reclama.

Se metió dentro conmigo, sentándose detrás.

Dante: Necesito que me ayudes a ayudarte amor...

Era un amo dándole órdenes a su sirvienta, haré todo lo que el me pida. Corrió mi pelo hacia un costado y comienzo a gemir de placer cuando recorrió desde mi clavícula hasta mi ombligo solo utilizando uno de sus dedos. En eso agarró mi cuello con su otra mano y propinó una serie de besos allí. Puedo hasta escuchar el latido de mi corazón galopando fuerte.

Y en eso lo siento, su mano está entre medio de mis piernas haciendo que incline mis caderas más pegadas a él. Puedo escuchar como gime el también, eso me hace erizar la piel por completo.

Frotó mi parte de forma suave por un tiempo y luego aceleró el proceso casi tocando mi entrada con sus dedos, pero sólo como provocando.

Dania: Dante (es lo único que logré decir)
Dante: Aún no te corras (mordió mi oreja) hazlo cuando te lo diga muñeca.

No puedo decir más palabras porque no logran salir de mi boca, sólo monosílabos que anuncian que estoy presa de su tacto. Antes que llegue a mis límites Dante se paró y me agarró de la cintura, colocó una silla delante de la mesada del lavatorio, donde se sentó y a mi me colocó encima de la mesada.

Dania: Que haces?? (lo miré desde arriba y sus ojos son completamente oscuros)
Dante: Disfruta mi cachorra...

Solo placer, nada más que placer siento, su lengua está allí abajo y hace maravillas. Me siento tocando el cielo con las manos, la electricidad corre mi cuerpo, mis gemidos son cada vez más seguido y cuando él me dijo: "quiero probar tu sabor", suelto lo que me pidió.

Me ruborizo por lo que acabó de pasar, el se levantó quedando frente de mí, yo no puedo más que mirarlo, porque aún sigo agitada y para completar, se inclinó mientras con un dedo recolectaba parte de lo que mi zona largo. Abro los ojos como plato al verlo saborear su índice como si se tratará de un dulce.

Dante: Jodidamente exquisita mi amor (dijo en mi oído)

Lo abrazo para quedar sobre su pecho cubierta y evitar las miradas, mientras que mis ojos quieren cerrarse por lo cansada que me encuentro, gracias a esto pude saciar un poco de mi sed de él.

Siento como me tomó por el cuerpo, llevándome como si fuera una princesa de vuelta a la bañera. Me colocó en la pose inicial en la que estábamos y comenzó a tallar mi cuerpo con la esponja.

Sin darme cuenta estoy siendo bañada por mi mate y es la sensación más placentera que pudo darme. Sin contar lo que pasó recién.

Me levanto a penas termino nuestro aseo, me coloco una bata y sin poder reaccionar él está guiando mis pasos hacia la cama para recortarse conmigo.

Dania: Porque puedes ser hielo y fuego al mismo tiempo? (pregunté dandome vuelta y mirándolo)
Dante: Porque eso es lo que provocas en mi... (acarició mi mejilla)
Dania: Es el vínculo tal vez lo que nos une, lo que hace que actuemos así...
Dante: Es más que eso...
Dania: De que hablas?
Dante: Sabes porque las chicas prefieren a los malos?
Dania: Es broma? No creo que sea así!
Dante: Es cierto (besó mi frente) mientras que el héroe es capaz de sacrificarlas por el mundo (besó mi nariz) nosotros los "chicos malos", somos capaz de sacrificar el mundo por ustedes... Soy capaz de sacrificar mi mundo por ti, hoy más que nunca...
Dania: De dónde sacaste ese verso?
Dante: No es verso, es realidad... (besó mis labios) Descansemos, va a ser largo este día...

Dicho esto, mi masoquista pensamiento confirmó que es realmente cierto lo que él está diciendo. Aunque a mi entender el sólo se quiere poner en el papel de villano para no sentirse débil.

Quisiera que nos congelemos en estos momentos para poder disfrutar aún más el uno del otro pero se que no es posible y aún no me preparo psicológicamente para lo que debemos hacer esta noche.

Por momentos me doy vuelta, hago que apriete mis caderas y me dejo llevar por el sueño, voy a recuperar un poco de energías. Estoy durmiendo acurrucada en los brazos del hombre que quiero.

~.Amor en Guerra.~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora