One Shots Malec

Mini Alec (1K 👁 )

Un error.

Haciendo un encargo; un ingrediente demás...

Y ahí estaba.

Su precioso nefilim, pero con 4 años.

¿Qué iba a hacer ahora?

Trató de recordar todo lo que le contaron Izzy, Jace y Maryse sobre su infancia.

Según lo que le dijeron, siempre había sido el mismo; tímido, o más bien temeroso de arruinar algo.

Como en ese momento; paradito enfrente de él, analizando todo a su alrededor, hasta que sus ojitos se posaron en él, y se abrieron al máximo, sorprendidos por la cantidad de brillo y purpurina que veían en sus ropas, y cuando vieron sus ojos de gato se abrieron aún más.

-No te alarmes, pequeño.
-¿Quién es usted?
-Me llamo Magnus.
-Disculpe ¿Usted es un su-sutterraneo?
-Sí - al ver la expresión de miedo, Magnus recordó:este era el Alec criado por exmiembros del Círculo. Solo ellos sabrían que le habían dicho, pero él se podía dar una idea.

-¿Usted si se baña? - la línea de preguntas cambió inesperadamente, dejándolo un segundo con la boca abierta.
-¿Qué?
-Que si usted si se baña.
-Todos los días, pequeño - su expresión se relajó notoriamente- ¿Por qué la pregunta?
-Es que mi mami dice que no debo estar cerca o hablar con sucios sutterraneos, porque me harían daño. Pero usted sí se baña - Magnus no sabía si reírse o rodar los ojos. Definitivamente a Maryse y Robert del Círculo les daría un infarto si vieran a su pequeño niño en el hogar del brujo.

-Bueno, nada que temer aquí. Tus papás y yo somos amigos.- para Magnus fue muy difícil decir eso sin reír a carcajadas.

-¿Por qué estoy aquí?¿Mis papis me trajeron?

-Sí, tenían que ir a Idris y se llevaron a Izzy, y me como no te podían llevar, me pidieron que te cuidara- A Magnus no le gustaba ocultarle nada (cada vez que lo hacía las cosas terminaban mal), pero supuso que eso era más fácil de procesar que la realidad.

-Pero yo quería ir-dijo haciendo un puchero.
-Lo siento, pequeño
-¿Cuándo vuelven?

-Mañana pasan por ti.- dijo. En cuanto terminara su encargo, se pondría a buscar una manera de regresar a su pequeño a la normalidad. Por más que le gustaran las vistas, al día siguiente tenían una comida en el Instituto, y dudaba salir vivo si lo llevaba así.

-¿Por qué?¿Te molesta mi compañía?- dijo, haciendo que la expresión de Alec cambiara rápidamente de tristeza a miedo.

-No. Perdón si lo ofendí- el brujo negó y empezó a limpiar su desastre. Iba a empezar con su trabajo nuevamente cuando vio que el niño seguía en el mismo lugar.

-¿Por qué sigues aquí?- preguntó curioso, sin saber que sus palabras se podían malinterpretar.

-¿Lo estoy molestando? Perdón.Debí ser más silencioso. Malo Alec.-dijo, haciendo que el corazón del brujo se rompiera. Por supuesto: este era el Alec criado para ser el perfecto cazador de sombras. Sólo el Ángel sabría desde que edad lo empezaron a entrenar.

-No, pequeño. Nunca me molestarías, al contrario.- dijo sinceramente.

Magnus nunca había anhelado tener una familia, tanto por ser estéril como por ser inmortal. Pero ahora que veía a mini Alec, una extraña tristeza se apoderó de él.¿Alec querría hijos?¿Habría considerado alguna vez formar una familia con el brujo?¿Acaso había arruinado las posibilidades de Alec de tener una familia?

-¿Por qué está llorando, señor?¿Le duele algo?- dijo el pequeño, regresándolo a la realidad, y vio al niño preocupado enfrente de él. Maldición, hasta siendo niño Alec seguía teniendo el poder de sacar a flote sus verdaderos sentimientos.