capitulo 13

4K 250 14
                                    


-¿Por qué estoy haciendo esto?- me queje en voz baja, por no se cuantas veces desde que me entere pero ahora en voz alta.

-Por el simple hecho de que llevas años sin asistir a una reunión familiar de los Tuell, tu hermano todos los años asiste y se porta bien- dice mamá, siempre metiendo a Damian donde no se requiere.

- Por algo es que nunca asisto, ni siquiera a papá le gusta ir y eso que es su familia- me cruzo de brazos si la boda de Raisa estaba llena de hienas hambrientas por el chisme esta es peor porque aquí solo se juntan los Tuell aunque sean muy lejanos y amigos de cada uno.

-Tu papa siempre se divierte, ¿O no?- veo como papá ve a mi mama y a mi nerviosamente un par de veces.

-Por supuesto que me gusta terroncito, además Jane tienes que estar feliz tu eres la de relaciones  te sabrás mezclar y recuerda que acabas de cerrar un buen trato ademas de eso te divertirás- mandilón.

-Como sea, solo advierto que cuando me divierto mas de uno pueden salir heridos- saben que esa amenaza es cierta, aun no se les olvida que cuando cumplí quince una prima me insulto por mi falta de pechos y yo tome una rebanada de pastel y se lo embarre en la cara haciendo que se metiera el pastel en su nariz y bueno esa es otra historia casi olvidada.

-No Jane, todos te quieren ver, están muy emocionados por ver tu cara no seas grosera- me quiero reir, como me estiman tanto, nunca guardo mis comentarios a menos que en el medio haya dinero involucrado y ellos lo saben bien.

Maldigo una y otra vez a Damian, se a de ver casado en esta fecha solo para faltar a esto, merezco mas de recompensa que una mugre casa y un su cochino dinero.

-Además va a venir la abuela- dice papá, sonrió, la abuela o mejor conocida como la matriarca Tuell, una mujer de carácter con un sentido de humor un poco negro y pensamientos adelantados a su época y mucho poder pero solo tiene un fallo.

-Esta bien- me siento derecha esperando a llegar.

Luego de minutos que para mi pasaron como segundos la limusina paró dándome a entender que es hora, tomo mi cartera cuando se abre la puerta y siento los primeros flashes, veo como mi papa sale para tenderle la mano a mi mamá ayudándola a salir cuando ella sale le da un beso en la boca, ruedo los ojos, son como unos adolescentes.

Salgo y pongo mi mejor sonrisa a las cámaras mientras camino a la entrada escuchando pregunta tras pregunta, sigo sin contestar ninguna o voltearme hasta que voy a entrar giró un poco mi cara y les mando un beso haciendo que todos exclamen más fuerte sonrió por eso entrando a mi próximo entretenimiento, al parecer mi enojo bajó gradualmente.

Junto a mis padres voy saludando a uno que otro, todo sigue igual a como una adolescente yo lo recuerda, muchas cabezas rubias característico de los Tuell y acompañantes, vestidos de gala mostrando su mejor joyería y con unas sonrisas tan falsas, que me hace volver a lo que hace años por primera vez pensé, es a veces es mejor alejarse e ignorar a familia tóxica, pero véanme aquí.

-Jane qué gusto verte de nuevo, tantos años sin mostrarte, mira que grande estas, ya estas por tus treinta no- sonrió aun mas cuando siento cómo me rodea el primer grupo de tías, la que pregunta ahora es la tía Paty, una señora entrometida que se peina como la princesa leía.

- Que gusto volver a verlas y no apenas tengo veintisiete- contestó lo más cordial posible.

-Oh te ves mas grande pero sigue bonita, pero dinos ya te casaste una joven tan bonita como tu no puede estar soltera mucho tiempo- o que perra, ellas por supuesto que saben que no estoy casada.

-No, no me he casado- respondí, tranquilamente.

-Que lastima, ya casi se te esta pasando el tiempo, esa belleza tan radiante que tienes no dura mucho pero bueno con esos rasgos debes tener muchos pretendientes - se ríen todas bajamente, de la perdida de belleza a de tener experiencia pensé viendo a la otra tía, me siento como en una película ochentera donde las populares le hacen bullying a la nerd solo que ahora son viejas con demasiado tiempo libre pero no para mejorar sus problemas contra una joven muy bien informada.

-Lo tomare en cuenta pero de lo que estoy de veras muy preocupada ahora es de su hija, me entere que ya va por su tercer divorcio- chasque la lengua negando como si estuviera muy triste por ella- pero bueno todavía es muy joven tiene como veinte tres y esta sana apenas va por su segunda cesárea, conozco a un abogado increíble, si quiere le doy su tarjeta de contacto- veo como le tiembla el parpado derecho pero manteniendo su sonrisa, mientras las demás se quieren reir.

-No te preocupes, le diré tu sugerencia, luego te presento a mis nietos para que veas que bonitos son los niños a ver si te animas a tener uno, o cierto que no estas casada- me rio en voz baja como si hubiera contado el mejor chiste o eso me hiriera.

-Oh no hace falta, no quiero casarme, con estos ejemplos cada vez peores de divorcios o engaños  que se ven diario como su hijo el mayor con la masajista recurrente asustan a uno- me tapo la boca como si revelara un secreto nacional, todas ella exclama con asombro, veo como su cara cada vez se pone más roja, tambien noto como la esposa que estaba en ese círculo deja ver una cara triste y se va a paso rápido.

-Oh no, lo siento no se sabia que no estaban informadas, perdonen que tonta soy, pero bueno eso nunca se tarda de descubrir y estamos en familia no- me alegro de haber ido por unos masajes antes de la boda de Raisa, la señora quiere decir más pero yo veo mi reloj de mano.

-Lo siento me tengo que ir a conversar con la demás familia que no la he visto en años, que emoción, que tengan buena noche tías, muy emocionada de saludarlas- sonrió dejándolas sin palabras yéndome a la barra de tragos sintiéndome de lo más alegre pero esa sonrisa se borra de inmediato cuando enfrente de mi aparece mamá con una cara de seriedad veo mas atrás de ella y miró a la pobre joven llorando con su marido infiel sobando su espalda, mierda.

JANEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora