Semi-final

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Los días pasaron, la academia abrió sus puertas a sus nuevos egresados, incluyendome, estoy yendo sólo Lunes, miércoles y fines de semana, estoy practicando una coreografía bastante sencilla, ya que soy nueva en esto y no quieren que me rompa la pierna apenas entrando.

Me miró sobre el reflejo del gran cristal y sonrió al estirar mi pierna, quedando abierta completamente. He estado muy nerviosa con el tema de el festejo de nuestros cinco meses, de noviazgo con Jungkook.

Me decidí, sí, lo haré. Pero, debo de organizar todo de manera ordenada y propia, para el gran momento. Jungkook ha estado un poco raro estos días, pero creo que es porque no sabe que debería de regalarme, pero ahora es mi turno. He tratado de hacer lo posible para que me diga que es lo que sucede, ha estado así desde que tuvo una charla con sus padres, el día en que se fueron a Japón.

Chasqueo la lengua y bajó mi pierna, tomando la otra y estirandola hasta quedar nuevamente abierta.

Seguí ensayando, una y otra y otra vez, hasta que mi cuerpo ya no puede más y la hora de salida es avisado por un ligero timbre. Camino hacia mi mochila deportiva, tomó un pañuelo para secarme el rostro por el sudor, después, tomó un poco de agua y cuando siento que estoy bien para cambiarme, tomó mi maleta y entro a vestidores, seguida de algunas chicas.

En la Academia, los chicas y las chicas, tienen sus propios vestidores y baños para darnos una ducha, obviamente no me siento muy cómoda bañándome con ojos sobre mi figura, sé que estoy entre mujeres, pero eso no deja de ponerme incómoda.

Una vez que estuve vestida con un jean negro y un top azul, me cuelgo mi mochila en mi hombro y empiezo a caminar hacia afuera. Últimamente no he visto mucho a Ten, lo que quiere decir que él también está ocupado con alguna coreografía.

Al salir afuera,. fruncí el entrecejo al no ver por ningún lado el auto de Jungkook. Meto la mano en mi mochila y reviso si no hay algún mensaje, pero nada. No me queda de otra, que marcarle.

—Lisa, ¿Paso algo?

—Eso me preguntó yo, Jungkook. Dijiste que pasarías por mí, ¿Sucedió algo?

Escuchó un suspiro de cansancio.

—Lo siento, tengo tantas cosas en la cabeza en estos momentos que, realmente olvide que tenía que ir a buscarte.

Fruncí el entrecejo. Molesta.

—Jungkook, has estado así desde que tus padres se fueron a Japón, y realmente trate de darte tu espacio y comprenderte, para no quedar como la novia tóxica que quiere controlar tu vida, pero realmente ya me cansé de verte de esta manera, perdido y pensando mucho. Lo siento mucho Jungkook, pero vamos a hablar cuando llegue a casa.

Y sin más, colgué.

Eché mi cabello hacia atrás y solté un suspiro pesado.

—¿Estás bien? — miré a Ten y sonreí falsamente, mientras asentía.

—Todo bien, gracias — él asintió.

—Te veo el sábado — asentí. Él se dió media vuelta y se fue.

Tarde un poco en conseguir un taxi, pero logré hacerlo, le dije hacia donde ir y no dudo en conducir. En el camino mi mente empezaba a recrear una escena dónde Jungkook y yo peleabamos y terminabamos. No quería ser negativa y menos en un tema tan importante como nuestra relación, pero realmente siento que hay algo que no quiere decirme, y presiento que es algo bastante fuerte. No quiero empezar a sacar teorías apresuradamente.

El taxi se detuvo y yo no dude en pagarle y bajar. Jungkook me había llevado a visitar un par de veces el departamento en dónde ahora vivía, lo cual ahora fue de gran ayuda en saber dónde estaba sin tener que preguntarle a Sowon y hacerle saber que estábamos en una pequeña disputa.

Subí al ascensor y presione el botón catorce, espere pacientemente, mientras que una canción estresante y bastante mala, era reproducida por el ascensor. Eso me hizo estresarme más y molestarme el doble.

Las puertas se abrieron y yo bajé, doble a la izquierda y localicé la puerta de Jungkook, camine hasta esta y no dude en poner la contraseña que había decidido poner. Nuestra fecha de noviazgo.

La puerta se abrió y yo entre.

Dejé de mala gana mi mochila deportiva en el sofá y miré a Jungkook, quien estaba en la sala, sentado en el otro sofá, mirándome un poco...¿Preocupado? Su expresión no logro descifrar.

—Habla — pedí, al momento que me cruzaba de brazos.

—Lisa, perdón, he estado pensando muchas cosas, realmente lamento haberte dejado — se levantó y camino hacia mí, pero yo dí dos pasos hacia atrás. —Lisa, por favor.

—¡Por favor nada, Jungkook! — grité. Exploté. —Te he comprendido y no he querido presionarte con eso, porque sé que en algún momento me lo dirías, pero, ya pasó mucho y tú estás perdido en las nubes...¿O me dices que es lo que pasa o me largo por esa puerta? — señale la puerta de la entrada.

Él soltó un suspiro y talló su cara, sin saber que hacer.

Cuando hice el ademán de coger mi bolso, lo soltó.

—Me iré a Boston.

Me quedé estática. Mi mirada rápidamente cayó en él, quien me miraba triste.

—¿Qué?

—Es lo mejor para ambos.

Fruncí el entrecejo. ¿Lo mejor para ambos?

—¿De qué demonios hablas? — pregunté, sin poder creerlo que estaba diciendo. —¿Acaso, estás terminando esto? — él negó rápidamente.

—No, no, no, no Lisa. Quiero decir, que, ya sé lo que quiero hacer, bueno, a qué quiero dedicarme — me mostré aún más confundida. —Me iré a Boston a estudiar modelaje.

Parpadee repetidas veces. Vaya.

—P-Pero...¿Porqué hasta allá? Aquí en Corea también puedes estudiar modelaje, ¿Porqué quieres irte? — estaba a nada de soltarme a llorar como una jodida cría. —¿Porqué? — y finalmente, mi voz se rompió y mis lágrimas cayeron como cascada.

—En Boston hay más oportunidades. Esto era lo que temía, no quiero dejarte sola, te amo y realmente quiero estar a tu lado, pero... también quiero hacer esto, finalmente encontré algo que me agrade — cubro mi rostro, haciendo que mis sollozos se vuelvan aún más sonoros. —Lo siento, Lisa. De verdad, lo siento.

Sus brazos me rodean y me aprietan, confortandome, pero a la vez...lastimandome.

Poco después, de tranquilizar mi llanto, estoy sentada en el sofá, frente a él. Sorbí mi nariz y hablé.

—¿C-Cuándo... cuándo te vas? — limpié unas lágrimas que salieron sin permiso. No quería verlo.

—En una semana — dijo.

Asentí, pensando. Mi cabeza va a estallar.

—Así que, ¿Así termina esto? — él se sorprendió y asustó ante mis palabras.

—¿Q-Qué? ¿Quieres que terminemos? — preguntó rápidamente.

—Te vas a ir, ¿Qué esperas que hagamos? ¿Tener una relación a larga distancia? — pregunté con sarcasmo. Él completamente serio, asintió. —Eso no sirve, las relaciones jamás sirven ni progresan si es a distancia — dije.

—Mientras haya confianza, podemos esperar por el contrario... sólo es cuestión de confianza y amor — lo miré.

Sus palabras eran tan creíbles, que sin más, acepté. Aunque por dentro, me estaba doliendo mucho.

Aunque por dentro, esas palabras, fueran nada más que unas palabras vacías que inspiraban confianza al primer minuto de haberlas soltado.

Sólo teníamos una semana para nosotros dos.

Una semana, para después, verlo partir.



—LaOmmaChida💜💜✨✨✨


¿Qué opinan de la decisión que tomaron?

Los amo. 💖💖💖

»ACENDRADA #1 ✔️ [ Lizkook ] TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora