Limerence.

Capítulo 6.

—¿Vamos en tu coche o en el mío?—Preguntó Ámbar.

—Vamos en el mío, tengo ganas de conducir un rato— Sonreí caminando hasta los estacionamientos del alumnado, intenté esconder mi nerviosismo lo mejor que pude.

—Damm, ¿Hay algo que me tengas que contar?— Qué comes que adivinas... Tendré que contarle lo que sucedió con Callum, será una prueba de confianza.

—¿Me prometes no decirle a nadie?—Asintió—Estaba en mi habitación y Callum me besó—Obviamente omití los detalles tales como que estaba semi desnudo y que me acorraló contra la pared, abrió los ojos sorprendida.

—No me jodas Damm, ¿Enserio?— Estaba algo atónita, asentí mientras me subía al coche.

—Ay Ámbar, no es para tanto. Fue un simple beso que no duró más que dos minutos— Le gruñí un poco, me molestaba que hicieran tantas preguntas cuando contaba algo verídico.

—Tranquilo vaquero, sólo quería cerciorarme. Callum Foster es uno de los chicos más guapos y heterosexuales del campus, me parece muy sorprendente que te besara, te lo diste vuelta chico— Me dio con un codo divertida, hizo que le regalara una leve sonrisa picarona.

Encendí el coche y le di reversa hasta llegar a la avenida principal, mientras Ámbar me iba dando las indicaciones seguíamos nuestra incómoda charla, no suelo confiar así de rápido en las personas pero con ella me sucedió algo bastante extraño, parecía diferente a las demás chicas.

—Quizás tiene dudas de su sexualidad aún que no me interesa, no seré su juguete de prueba—Me mordí el labio recordando lo placentero que fue besarle, podría arrepentirme de lo que dije anteriormente.

—Mañana a la hora de almuerzo tienen entrenamiento, podríamos pasarnos por allí, ¿Qué te parece?—Guiñó un ojo, me hizo pensar seriamente en lo que quería pero hay un gran problema, en ese mismo lugar estará Darren con el cual también tengo una cita pendiente.

—Darren Black también me invitó a salir... Callum igual—Tragué saliva nervioso—No creo que sea bueno presentarme en su entrenamiento.

Se llevó uno de los dedos a la boca pensativa—Tienes razón pero de todas formas tienes que hacer acto de presencia.

Finalmente después de una hora en coche llegamos al centro comercial, estaba repleto de gente comprando por doquier mientras que Ámbar y yo simplemente llegaríamos a una tienda en especial, American Apparel. Nos probamos unas cuantas prendas cada uno, no me convencía casi nada hasta que vi un Sweatshirt negro con un trazado de acuadrilles blanco, bastante lindo y al aparecer de mi estilo. Ámbar compró una falda color dorado y un top blanco, una combinación que a mi parecer es bastante bonita y aparte combinaba con su tono de cabello. Conversamos un rato y me invitó hasta el Starbucks que estaba camino a la universidad, haber conocido el centro comercial me abría un millón de posibilidades como poder conseguir trabajo en él y escaparme de vez en cuando para hacer unas cuantas compras necesarias. El Starbucks estaba casi vacío, nos pusimos en la fila hasta que llegó nuestro turno y el cajero nos miró con una leve sonrisa, era bastante atractivo.

— ¿Qué deseas llevar?—Preguntó tomando un plumón.

—Hmm, quiero un Mocha Frappuccino venti, por favor—Sonreí.

— ¿Y tú?—Le preguntó a Ámbar.

—Un Caramel Frappuccino.

—Necesito sus nombres—Tomó los vasos y escribió "Damien :) "y en el otro "Ámbar :)", las caras felices iban incluidas.

Mientras tomábamos nuestros refrescos hablábamos, en realidad Ámbar me hablaba y yo pensaba en lo guapo que era Callum y en lo bien que besaba. Sus labios eran tan suaves que hacían la perfecta combinación con los míos que son tan delicados, por otra parte estaba Darren con su estatura perfecta y voz penetrante junto a sus ojos que intentan decir algo cada vez que nuestras miradas se encuentran. ¿Por qué no paro de pensar en ese par de idiotas?