Capítulo 12.

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Mis encuentros con Kim han sido desagradables al igual que su personalidad chillona, no es raro pensar que posea una personalidad narcisista igual a Callum, si fuese así serían la pareja perfecta y es de esperarse. Su visita había dejado mis nervios de punta al igual que mi rabia, no podía seguir aguantando sus tratos con aire de superioridad en mi cara ¿Acaso esa chica no tiene un poco de sentido común?, no todo el mundo es igual que sus seguidores. Comencé a hacer mis deberes y así intentar olvidar la reciente escena donde la zorra irrumpe como Pedro por su casa, Química Orgánica no era mi fuerte pero sí anatomía por lo cual se me hacía mucho más fácil hacer las tareas de Anatomía que las de Química, saqué los apuntes donde tenía destacado los puntos más relevantes dentro del texto en el cual salía la mayoría de la materia que nos estaban pasando en clases. Mamá me había enseñado éste método, marcar frases o trozos de texto en los cuales hay información relevante. Podría pasar horas y horas avanzando en mis tareas pero no podía olvidar que también tenía vida social, eran casi las cuatro de la tarde y no pensaba quedarme en la habitación lo que quedaba de día, tomé el móvil y marqué el número de Ámbar.

—Oye, ¿Vamos al centro comercial?—No la dejé respirar, necesitaba salir.

—Upa vaquero, ¿Por qué tan exasperado?—Era inevitable no reír cuando me llamaba vaquero.

—Si manejas hasta el centro comercial te cuento.

—Trato hecho, paso por ti dentro de diez, no me hagas subir las escaleras hasta tu cuarto por favor. —Suplicó

—Está bien, esperaré abajo. No tardes—Corté, me cambié de ropa lo más rápido que pude.

Mis fieles pantalones ajustados color negro junto a mis Nike Air Force one blancas, una playera blanca sin diseños y unos anteojos de sol, un look bastante sobrio y despreocupado como es de costumbre. Me senté en las escaleras, estaba a punto de sacar un cigarrillo pero necesitaba controlar el vicio así que no lo hice, me preguntaba por qué no había invitado a Fredd y sinceramente no lo tenía en mente pero lo más probable es que Ámbar si llegue con él.

—Aquí estás Vaquerito— Se veía linda como es de costumbre pero algo me llamó la atención, venía con una pequeña sorpresa, una chica estaba a su lado y al otro había otra niña, Fredd.

—Creí que demorarías un poco más, pero me equivoqué—Sonreí y Fredd me abrazó.

—Si nos tardamos fue culpa mía, aún no me acostumbro a mi nueva plancha para el cabello—Puse los ojos en blanco.

—Ah Damm, te presento a Matilda, mi hermana— Matilda se acercó y besó mi mejilla, tenía un aspecto bastante rudo y me intimidaba.

—Mucho gusto— Sonrió y le devolví la sonrisa, siempre soy cordial con la gente nueva.

— ¿Y hace cuánto tiempo estás aquí?— Le pregunté a Matilda, si saldríamos con ella necesitaba conocerla un poco al menos.

—Hace tan sólo unos días, mamá pidió un traslado y ahora vendré a estudiar junto a mi querida hermana— Abrazó a Ámbar y noté la incomodidad de ésta, se veía a simple vista que eran polos totalmente opuesto partiendo porque Matilda trae puesta una playera de "Iron Maiden" con unas Converse negras que tenían la bota alta, unos pantalones negros y muy ajustados, el cabello crespo y de color rojo casi marrón, al contrario Ámbar tenía el cabello largo y colorín, vestía faldas cortas pero no en exceso, tenía una forma de vestir un poco más cuidada que el de su hermana. Lo que me faltaba conocer era su personalidad, lo más probable es que Matilda fuese más pesada y desagradable pero a la misma vez le guste decir chistes y hacer reír, espero llevarme bien con ella.

—Me alegro mucho, será mejor que nos apuremos porque planeo pasar a comer algo— Acomodé mi playera y subí en el asiento del co—piloto.

—Damm, deberías colocar tu celular en la radio, me gusta tu música— Dijo Ámbar.

Limerence.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora