Capítulo 21.

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— ¿Éste no es el que necesitas?—Me preguntó Darren tomando un libro de Álgebra.

—No, necesito uno en que sólo salga Geometría—Me rasqué la barbilla—Creo que estamos en el pasillo equivocado, la biblioteca es tan grande que ya no sé por dónde buscar.

—No te preocupes, del tiempo que llevo en esta universidad nunca me he dedicado a explorar los pasillos—Se encogió de hombros.

Necesitaba con urgencia aquél libro, los días pasaban cada vez más rápidos y aún me quedaban deberes por hacer, lo que menos quería era estar en la granja encerrado en una habitación haciendo ejercicios de Geometría, sería demasiado aburrido.

—Entonces éste será el día en que la recorras—Le saqué la lengua—Espero que no te moleste, me encanta ver libros, es uno de mis pasatiempos favoritos—Suspiré mientras sacaba otro libro—En mi estadía en NY, acostumbraba a ir casi todos los fin de semana a leer libros, recorrer librerías y esa clase de cosas.

—Suena divertido, en lo personal, nunca me han llamado la atención las librerías, ya sabes—Se encogió de hombros nuevamente—Me gusta más lo que tenga que ver con el deporte.

—Sabía que dirías algo relacionado con eso—Sonreí— ¡Bingo!—Exclamé, había encontrado por fin el libro que necesitaba.

A lo lejos, mis ojos lograron divisar una cabellera rubia que se me hacía bastante conocida, "Kim" pensé al instante pero era imposible que alguien como ella estuviese en un lugar como éste, sabiendo que los Inadaptados le daban asco no podría siquiera poner un pie dentro de la biblioteca, moriría quemada al igual que un Vampiro cuando entra a una iglesia.

—Tierra llamando a Damm—Darren me hacía señas muy cerca a los ojos.

—Lo siento, estaba en otro mundo.

—Al parecer haz encontrado lo que necesitabas.

—Ajá—Asentí intentando buscar el pelo rubio pero ya no estaba.

—Entonces que hacemos aquí, vamos a alquilarlo y marcharnos.

—Espera, me gustaría sentarme un momento—Hice un pequeño puchero.

—Bueno, no tengo problemas—Puso los ojos en blanco y me acompañó hasta la mesa más alejada de los alumnos que habían.

—Perfecto—Abrí el libro ojeando lentamente cada página de él. Trigonometría me daba un poco de alergia al igual que la voz de Kim. —Esta materia es tan desagradable.

—Sí, pero con un poco de práctica se vuelve más bella, te lo aseguro—Me dio un pequeño empujón, Darren era tan agradable que no me daban ganas de marcharme.

No podía dejar de pensar en su voz mientras declaraba sus sentimientos hacia mí, su cara de nerviosismo y sus hermosos labios escupiendo aquellas palabras. Su tono de voz era hermoso, una mezcla entre dulce y grave, una voz que conquista a quien la escuche.

—Eso espero...—Dije perdiéndome en sus ojos

—Damm, me intimidas—Se colocó rojo, estaba superando todo tipo de límites. Debía comenzar a controlar mis instintos por un segundo.

—Perdón—Me rasqué la cara— ¿Ya tienes todo listo para el paseo?—Cambié el tema con descaro— ¿Qué día nos iremos?

Sacó su iPhone, estaba mirando el calendario.

—Ya tengo todo preparado, son aproximadamente un día y medio de viaje así que lleva todo lo que necesites para el camino—Suspiró guardando el celular—Nos iremos el Lunes que viene—Una fecha perfecta, estábamos a miércoles recién.

Limerence.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora