Voces Internas "la nueva leyenda"

CAP XI "PASO DE RIO, EL RECOLECTOR"

Durante dos largos y eternos días he caminado con tan solo al Sol como mi intenso e inseparable compañero, mas sin embargo, su compañía era mucho más grata que la visita nocturna de la luna al anochecer, en las mañanas aprovechaba en sol en su totalidad para avanzar más rápidamente y para cazar algo que comer -así como conejos, y unas que otras aves distraídas. En cambio, al ponerse el sol, me limitaba a buscar un buen espacio en donde pasar la noche a la intemperie -no se puede decir que ha sido muy cómodo, pero no estaba tan mal, no ha llovido en meses, y espero que siga así al menos hasta que consiga un buen refugio.

Luego de un largo trayecto, saque mi extraño mapa y me lleve una sorpresa ''Bosque Oscuro'' ya estaba allí habia aparecido su nombre y yo ni cuenta me habia dado, lo que mas me sorprendio fue ver una pequeña flecha y su punta cambia de dirección dependiendo a donde yo vea, era genial y por la parte de atras abajo en una esquina apareció mi nombre lo que no me agrado mucho fue el apellido Dracull... Ya me encontraba relativamente cerca del pueblo, y es por eso que al caer el sol decidí continuar el camino; a pesar de la penumbra y la poca luz que permitía la noche, pude reconocer un letrero en el camino que marcaba

>usted se encuentra en “Paso de Río”<

Listo! ya estoy en el lugar, y mi mapa maravilloso lo supo inmediatamente... solo espero haber llegado a tiempo para darle fin a la búsqueda, y encontrar al asesino que azota al pueblo es mi prioridad, apresuré el paso y al entrar, fácilmente pude notar que el pueblo está rodeado por un muro de unos 5mts de altura aproximadamente, en la calle principal que conectaba con la entrada del pueblo se visualizaba un grupo de personas discutiendo y gritando, el ambiente estaba un poco pesado y triste. Sin vacilar me acerque a uno de los guardias para obtener algo de información con respecto al disturbio.

– Hola amigo, ¡Acabo de llegar al pueblo! ¿Qué está pasando con ellos?  -pregunté refiriéndome al grupo de pueblerinos.

– ¡Jah, pésima elección para vacacionar chico! –Me dijo el guardia con expresión seria en el rostro- Este pueblo está en problemas, acabamos de encontrar otro cadáver, y con este ya van diez (10). Cada noche, sin falta muere alguien desde que encontramos el primer cadáver.

– ¿Una muerte cada noche? ¿Es en serio? –Exclame incrédulo.

– ¿Para qué te mentiría? –dijo encogiéndose de hombros- Es más, si estas de paso te recomiendo que continúes tu camino inmediatamente.

– Yo no estoy de paso, ni mucho menos de vacaciones, he venido a capturar al asesino que ronda por el pueblo, me cruce con su mensajero en el camino

El guardia al oír las razones por las cuales me encontraba en la zona rápidamente me inspecciono, Y por su expresión luego de esta note decepción en su mirada, tal vez por mi edad, quien sabe.

– ¿De dónde vienes? ¿Te envía la iglesia o el ejército? –preguntó mirándome con recelo.

– Nada de eso, es algo más personal ¡Soy como una especie de cazador independiente! No pertenezco a una sociedad, ni tengo un grupo, si a eso te refieres.

–¡Ni siquiera eres de un gremio! ¿Qué puede hacer alguien como tú? –dijo cruzándose de brazos.

Sujete la empuñadura de mi espada, mientras con un tono fuerte y seguro respondía su pregunta.

– ¡Ponme  a prueba y lo sabrás! –la expresión del sujeto al fin cambio un poco, y sorprendido respondió

– Bah, ¿que se puede perder? Sígueme niño.

Hice lo que me dijo y así lo seguí a través del pueblo atravesando la multitud, me llevo hasta la sede de los guardias de este pueblo, entramos en la habitación del jefe de los guardias, quien se encontraba sentado detrás de su escritorio, el guardia de la entrada luego de explicarle mis motivos para estar allí me dejo a solas con el fornido desconocido, quien me invito a tomar asiento frente a él y comenzó a hablar.