Voces Internas "la nueva leyenda"

CAP XV: Torneo en la Arena

Ya habíamos sido divididos y había quedado en el segundo grupo. El primero ya se encontraba en la arena, y es bastante numeroso, consta de ochenta y seis participantes, los cuales ya se mataban unos a otros. La peor parte sin duda era que las armas casi no tenían filo. Con el fin de que ningún golpe causara heridas mortales con facilidad, para darle más brutalidad al evento. Era un espectáculo bastante macabro. Ver personas destrozarse unas a otras sin piedad alguna. Pero los peores eran aquellos en las gradas, estaban llenas de espectadores quienes disfrutan de esta matanza con placer y emoción. Mientras observaba, alguien se acercó a mí, era Lutter.

– ¿así que tú eres Gabriel? No me gustaría estar en tu posición -dijo el viéndome atento- todos estos tipos están informados de que si te matan serán recompensados-me avisa- ¡todos irán por ti! ¿Qué triste no?

–muy triste -respondí yo sin mostrarle expresión alguna solo concentrándome en el próximo combate. La arena estaba manchada de sangre.

–hay muchos enemigos fuertes, así que no te descuides, hablando de ellos uno viene hacia acá –dijo haciendo una seña con su rostro para que volteara a ver. 

El escolta de Samuel, el sujeto enorme que llaman martillo venia caminando en nuestra dirección.

–no nos importa si solo eres un niño, hiciste enfadar a Samuel, disfrutare torturándote, -dijo para mostrarme una horrible sonrisa con sus dientes amarillos- sentirás tanto dolor que me pedirás que te mate, pero no serás más que un juguete para nosotros hasta que tu último aliento se escape de tu cuerpo destruido. -Al decir esto comenzó a retirarse mientras reía a carcajadas, tal vez piensa que intimidarme será algo beneficioso para él.

-oh… pero que lindo amigo tienes Gabriel –dijo Lutter poniendo una de sus manos en mi hombro.

  -ya lo había visto antes con Samuel ¿qué hace aquí? –pregunte interesado.

–lo que se está jugando es un arma de dragón, esas cosas son muy valiosas y poderosas, Samuel hace que sus propios chicos participen en los torneos para eliminar la competencia y asegurar los premios. Y a Martillo estos torneos le van como anillo al dedo.

– ¿por qué lo dices? –pregunte de inmediato- ¿Tiene alguna ventaja?

–¡claro que sí! –respondió el como si fuera evidente- ¿viste su tamaño? es un gigante entre nosotros, y todos los que están aquí han sido entrenados en el uso de algún arma ¿verdad?... pero las armas que usaran casi no sirven, mientras que el solo usa un enorme martillo, solo es una masa de hierro no creo que importe en qué estado se encuentra.

Hablamos por un rato aprendí un poco de los guerreros que se veían más peligrosos, ya faltaba poco para entrar en la arena. El combate del primer grupo acababa de terminar. De los ochenta y seis guerreros del primer grupo, 10 quedaron en pie. Dieciséis mal heridos y el resto… ¡muertos! Mientras sacaban los cuerpos de la arena a nosotros nos entregaban nuestras armas, yo solo miraba detalladamente, no estaba seguro de querer usar una de esas cosas.

–¿Gabriel que arma piensas usar? –pregunto Lutter ofreciéndome varias opciones.

–Alguien me enseño –sonreí por un segundo mientras recordaba a Anthony y sus enseñanzas- que es mejor pelear con los puños, que usar un arma dañada la cual solo me hará más lento –el me vio por un segundo y luego se burló. No dijo más, me regalo una sonrisa como si fuese a ser la última vez que nos veamos y continuo su trayecto.

No se tardó mucho más, entre en la arena junto a todo el segundo grupo, en total eran noventa y dos incluyéndome. Hay un balcón el cual sobre sale en lo alto de los muros de este sitio, en este se encuentra Samuel y algunas personas más. Lo miraba sin expresión alguna, ese hombre no me generaba ningún sentimiento, ni rencor, ni asco, no me importaba.