Número desconocido

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No tardamos mucho en acostar a Apolo en la cama de Raquel, el pobre no dio ningún problema, estaba totalmente KO, el alcohol no le había sentado bien y seguramente al día siguiente tendría una resaca de narices.
Daniela y yo nos fuimos de la casa, después de que Raquel nos insistiera mucho, porque pretendíamos quedarnos con ella cuidando de Apolo.

-Ni de coña, os vais a vuestra casa, puedo apañármelas sola con un niño borracho -dijo mientras nos empujaba por la puerta de su casa.

Dani quiso llevarme en coche hasta un punto intermedio entre su casa y la mía, ya que yo vivía algo más lejos de la casa de Raquel que ella.
El silencio reinaba entre nosotras, lo único que se escuchaba era una canción de Red Hot Chili Peppers en la radio, el ambiente era extraño, incómodo diría.
Me atreví a mirarla, seguía hermosa, se había recogido el cabello en una cola de caballo, su maquillaje seguía intacto en su rostro, como si las horas anteriores no hubieran ocurrido.

¿Cómo alguien puede tener un perfil tan malditamente perfecto?

Mi cabeza daba vueltas y no sólo por el alcohol, estaba confusa, la había besado, de eso no había dudas. Por muy borracha que estuviera en ese momento, no era tan inteligente como para imaginar un beso tan maravilloso como el que me di con ella.
Nunca había besado a una chica antes, sí, me lo había planteado, pero no había llegado a dar el paso. Tampoco es que fuera una experta en besos, en toda mi vida, sólo había besado a dos chicos, y uno de ellos fue jugando a la botella en el colegio.

-Puedes dejarme aquí, es sólo subir la calle -Daniela estacionó el coche a un lado de la carretera, volteó en mi dirección, se quedó mirándome en silencio unos segundos, segundos en los que se formó un nudo en mi pecho que me impedía respirar. Abrió los labios como para decir algo, pero volvió a cerrarlos sin emitir sonido alguno.

-No hay de que -dijo con simpleza, apretando el volante con las manos. Salí del coche, el nudo que había en mi pecho se deshizo al salir del vehículo, era como si estando cerca de Daniela se cortase mi respiración.

-Hasta mañana -sin decir nada más, el coche se marchó por dónde había venido, dejándome completamente sola en la carretera que llevaba a mi casa.
Con la cabeza hecha un lío y los zapatos de tacón en la mano comencé a caminar hasta casa.
Por suerte, tanto mamá como papá estaban dormidos, avisar de vez en cuando de dónde estás te da ventajas, como la confianza de tus padres.
Subí a mi cuarto tratando de no hacer ruido, entré en mi cuarto cerrando la puerta tras de mi.
Suspiré.
Que día, y solo había sido el primero.

Me tumbé en la cama sin siquiera cambiarme, intentando ordenar los sucesos de las anteriores doce horas.
1. Había llegado al pueblo después de tres horribles horas de trayecto en una furgoneta que estaba para el desguace

2. Hice el ridículo cayéndome en mitad de la calle, tirando al suelo el contenido de dos cajas.

3. Conocí a Yoshi (aunque en un inicio casi le mato por decir que One Direction es de niños)

4. Me invitó a ver pelis con él y con Raquel.

5. Me derrumbé viendo pelis con él y con Raquel

6. Ahogué mis penas en un Oreo Shake

7. Conocí a Daniela y nos fuimos de fiesta a un club que parecía sacado de la película "Cabaret"

8. Subí al Olimpo y conocí a Apolo.

9. Me besé con Dani.

10.Ayudamos a Raquel a cargar con un Apolo borracho.

11. Dani me llevó hasta casa en coche sin decir absoluta nada del beso.

𝗧𝗵𝗲𝗯𝗲 || Apolo HidalgoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora