Día Tranquilo

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Pov Narrador

Aún era de madrugada pero no podía dormir, simplemente no tenía sueño, haci que me levanté de la cama y fui a lavarme la cara, después recogí mi mochila y salir a las calles de Orario para empezar a pegar carteles.

Justo cuando salía del hospedaje me encontré con Natalia que ya se encontraba despierta haciendo limpieza y simplemente me dio los buenos días para luego despedirme, lo único que pensé de ella fue que era muy amable y que se tomaba encerio su trabajo.

...

Estuve un largo rato caminando y pegando carteles en las paredes de las casas preguntandome porque tuve una pesadilla de esa forma, entendía que soñar con Rem era algo normal por el echo de extrañarla, pero me resultó raro que también soñara con poder usar la mano oculta. No niego que sería interesante tener esa habilidad, incluso llegué a pensar que en realidad el gen de la bruja de la pereza se había alojado en mí, pero en ningún momento me había sentido diferente como para ser capaz de usarlo, por lo que me convencí a mi mismo de que no llegaría a ser capaz de usar dicha habilidad que a mi punto de vista estaba OP, incluso me sentía como idiota por recordar que pude preguntarle a Echidna sobre aquello y quitarme la duda pero no lo hice porque no se me ocurrió, fue la muestra más grande de idiotez que tuve después de mucho tiempo.

Yo: Más distraído no puedo ser... Pero... Si en mi sueño pude, entonces también puedo aquí csm!

Traté de invocar una mano sin fé a que de verdad funcionará pero me llevé una sorpresa cuando vi un pequeño tentáculo salir del centro de entre mi pecho y estómago.

Yo: Que?! No me jodas! Encerio?! -viendo como el pequeño tentáculo se desvanece-

Lo vuelvo a intentar una segunda vez pero ahora con más intención y me doy con la sorpresa de que una mano alargada, delgada y tambaleante emergía.

Yo: Esto es increíble! Si puedo!! -mostrando una sonrisa- Y pensar que creí que esto no había pasado... ¿Podré ser capaz de controlarlo?

...

Continué con mi recorrido pegando carteles pero esta vez también estaba tratando de manifestar una mano más estable a la que ya había logrado en un inicio.

Haci estuve por un rato haciendo tonterías hasta que terminé llegando al frente de lo que parecía una vieja iglesia abandonada.

Yo: F por esta iglesia, porque está toda destruida? En cualquier momento se caerá.

También me fijé en el resto de casas y no eran iguales a las que se encontraban por el territorio en el que estaba el hostal donde yo pasaba la noche, sin duda estas estaban ligeramente más deterioradas.

Yo: Así que aquí también hay este tipo de casos... Bueno, supongo que en todas las ciudades debe haber distintas clases sociales...

En eso veo como una chica de cabello negro con dos coletas que estaba ayudando a caminar a un chico de cabello blanco que a simple vista se veía como si hubiera sido golpeado hasta que quedara inconsciente, por lo que sin siquiera pensarlo procedo a quitarme mi mochila y acercarme rápidamente a la chica para ofrecerle mi ayuda.

Yo: Permíteme ayudarte.

Por alguna razón cuando vi de cerca a la chica me parecía extremadamente joven a lo que creía cuando la vi desde cierta distancia, además de que su tamaño no ayudaba; también estaba el caso del chico, que al tenerlo de cerca lo ví como un niño aunque fuera ligeramente más alto que la chica.

Chica: ¿Que? Quien eres? -dice mostrando un semblante confundido-

Yo: Solo quiero ayudar... Puedo curar sus heridas.

Yo en Re:Zero Donde viven las historias. Descúbrelo ahora