SNS II: Life Goes On|| Kookmin

Piloto; Jm

Jimin lloró incontables noches por lo que tuvo que hacer.

Jimin supo lo que era el odio real, su padre era la persona más despreciable del mundo para él, y lo odiaba por arrebatarle su felicidad.

Recordaba cada día y noche aquella plática que hizo que su padre fuese merecedor de su odio.

<<<<Jimin había tomado asiento en la oficina de su padre, expectante por lo que esté le diría.

—Veras, Jimin, debo hablar seriamente contigo.

El tono frío y seco que uso le dió escalofríos en todo su cuerpo.

—Tu madre no quería que te lo digamos, pero ella tiene cancer en la sangre, y está algo avanzado. Aquí en Corea no pueden tratarla.

El rubio se heló, ¿su madre siendo víctima de una tan horrible enfermedad?

Su padre volvió a hablar al verlo incapaz de decir palabra alguna.

—Me ofrecieron un puesto importante en la empresa, seré gerente en una cede que abrió recientemente en estados unidos... allá trataran a tu madre como se debe y es muy probable que eliminen el cancer, tienen los mejores especialistas.

—¿S-se van a ir?— Tartamudeó cuando habló.

—Aquí viene mi propuesta, hijo.— la palabra había salido tan fría que Jimin creyó que vomitaría.— Tu no sabes que estás arruinando tu vida jugando a ser homosexual, tú no eres así-

—¡No metas mi vida amorosa en esto!

—Sí quieres que tu madre viva más vale que me escuches.

Y con eso calló.

—En America tengo unos conocidos que quieren ser mis socios, esto nos beneficiaría mucho... y ellos están muy interesados en "el hijo de los Park", tienen una bella hija de tu edad que busca casarse con alguien de buena familia. La cosa es fácil, iremos los cuatro a estados unidos y conocerás a esa chica, o me voy solo y ya verás como ayudar a tu madre con su enfermedad.

—¡Es tu esposa! ¡No seas tan maldito!

—¡No me levantes la voz!

—¡No puedo irme, no me puedo casar con nadie que no sea Jungkook!

Había comenzado a llorar de la impotencia.

—Esa relación no te llevara a nada bueno, la gente como ese tal Jungkook está condenada a ser mal vista de por vida, agradece que te doy opción.

—No, no puedo— Soltó, sus lagrimas caían en demasía.

—Deberías ir entonces preparándote para un pronto funeral...>>>>

Tal como su padre quiso fue que sucedió.

Al llegar a Florida fue que conoció a una bella señorita llamada Kendall, quien se suponía que sería su futura esposa.

Ambos se llevaron bien al principio, pero el rubio simplemente no podía querer a alguien más, y ella también estaba enamorada de otra persona.

Los casaron en menos de un año, y los padres de ella le dijeron que querían un nieto en los primeros meses, pues al ser la única hija que tenían debían asegurar el futuro de la empresa familiar.

Ninguno quiso involucrarse sexualmente con el otro, así que el embarazo fue producto de una inseminación.

Nueve meses más tarde nació la niña más bella que Jimin jamás había visto, su pequeña Elizabeth fue un rayito de sol en la oscuridad.

Su esposa entro en una especie de depresión post parto, no quería ver a su hija cerca, ni tener que alimentarla.

El ahora castaño cuido de su linda bebé, con ayuda de su madre y hermana, quienes estaban maravilladas con la nueva integrante de la familia.

Su vida estaba tan movida y ocupada que no tuvo tiempo de superar a aquel peli negro de la manera correcta, por lo que todas las noches se encontraba soltando lágrimas debido al recuerdo, pero su tristeza no podía durar mucho, pues necesitaba atender a los llantos de su pequeña.

Sí, podía no ser feliz con el amor de su vida, pero su madre estaba sana, su padre lo trataba mejor, ganaba mucho dinero, y tenía a una pequeña criatura que no pudo evitar amar.

Después de todo, tuvo que continuar con su vida.

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Ahora ya conocen ambas caras de la moneda aaaaa.

Estoy emocionada por escribir esto.