SNS II: Life Goes On|| Kookmin

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Cuando Jungkook llegó a su casa todos lo interrogaron a cerca de la chica que conducía el auto del que bajó, y el tuvo que explicarles que era una compañera del trabajo con la que saldría más de rato.

Yoongi y Taehyung irían a cenar, así que ni siquiera se ofrecieron a acompañarlo, y su hermano mayor se quedaría en casa con su padre a preparar una deliciosa cena.

Se vistió con lo mejor que pudo, queriendo dar una buena impresión a sus compañeros de trabajo, y su novio fue cómplice para ayudar a elegir su conjunto desde una videollamada.

Llevaba una playera de un plateado brillante y de tirantes, y un pantalón de cuero negro.

Su cabello amarrado en una media colita, y estaba contento con el resultado, su novio le había dicho que lucía sexy así.

A las nueve y tres cuartos de la noche fue que recibió un mensaje de su amiga anunciándole que estaba esperándolo afuera de su departamento.

Se despidió de su padre y hermano, quienes le dijeron lo bien que lucía antes de salir.

—Wow, que guapo, esos tatuajes se te ven muy bien.— Halagó la chica cuando este subió al asiento de copiloto.

—Gracias Lisa, también te ves muy guapa.

La tailandesa le sonrió antes de arrancar el auto directo a "Golden Zone".

Jungkook tenía su vista perdida en las calles de la ciudad, realmente hermosas, los edificios, la gente, el ambiente era muy diferente a corea.

Pararon en un semáforo y cuando volteó vio el paraíso, era la playa de Miami.

—¿Está es la playa?— Preguntó asombrado.

—Sí, ¿ya la habías visto?

El chico negó.— No, pero no está nada lejos, voy a volver pronto.

—Llevo años aquí que ya se me hace normal, pero la primera vez que la vi me enamoré del paisaje.—Contó Lalisa.

—Concuerdo, creo que vendré a tomar fotos aquí.

—Puedo ser tu modelo, si quieres.—Ofreció, tratando de lucir linda.

El chico le sonrió.— Claro, puedo tomarte fotos cuando quieras.

Mientras Jungkook era amable, ella estaba confundiendo las cosas, interpretando su respuesta como luz verde a seguir haciendo comentarios de ese tipo más adelante.

El bar estaba sorprendentemente cerca de la playa, por lo que no demoraron más de tres minutos en llegar.

Una vez se adentraron en aquel lugar Jungkook se maravilló por las luces de colores, las cuales no llegaban a ser sofocantes para la vista.

La música sonaba lejana, y fue ahí que pudo darse cuenta que la discoteca estaba un piso arriba.

—Generalmente bebemos y comemos una hora y después nos pasamos al piso de arriba a bailar.— Explicó.—¡Sígueme, allá están todos!

Fue arrastrado por la tailandesa hasta una mesa donde pudo ver a dos mujeres y dos hombres sentados.

—¡Chicos, llegamos!

—¡Woah, Jeon Jungkook vino!— Exclamó una de las chicas, la cual suponía que era coreana.

En realidad después de un rápido análisis se percató que todos eran coreanos.

—Hola, soy Momo.—Se presentó en coreano con un extraño acento una de las chicas, la cual no había hablado antes.

—Soy Jisoo, un placer.— Está vez fue la chica que habló al inició.