Un auto con vidrios polarizados, dos chicos dentro besándose como si su vida dependiera de eso, ¿cómo habían llegado a eso?
Después de su corta sesión de besos en los baños de aquel lugar tuvieron que salir, ya que Taehyung los había ido a buscar para informarles que la hermana del peli rosa lo buscaba. El chico al ver sus aspectos no pudo evitar burlarse de ellos, pero lo tomaron con humor.
Aprovecharon para bailar un rato más con todos sus amigos en la pista, y finalmente después de un sutil juego de coqueteo entre Jimin y Jungkook el más bajo sugirió irse. Al principio el peli morado se negó, alegando a Jimin que era una fiesta organizada por su cumpleaños y debía disfrutarla, pero finalmente el peli rosa ganó.
Y lo primero que hicieron fue adentrarse en los asientos traseros, prácticamente Jimin empujó al peli morado, haciéndolo recostarse para subirse sobre él. Y si alguien los había visto no les importaba, el deseo que tenían por el otro era mayor que cualquier preocupación.
Los labios de Jungkook fueron atacados por los contrarios, sin darle tiempo si quiera de respirar.
—Wow, alguien está muy ansioso. ¿Bebiste?
Jimin se alejó para verlo con una expresión seria.—Ya deberías saber que no necesito alcohol para ser como soy.
—Lo sé, bebé. Así me encantas.
El peli rosa sonrió y una vez más juntó sus labios, y el chico debajo de él aprovechó para posar ambas manos sobre sus glúteos, masajeándolos sobre la ropa.
Fue al cabo de unos minutos que se volvieron a separar, agitados.
—Kook, me va a explotar el maldito pene. Haz algo~
Jimin sabía exactamente como actuar para obtener lo que quería, y en estos momentos eran las manos del otro entregándole placer. No le importaba tener que lucir como un necesitado, sabía que eso ponía en demasía al peli morado y no le importaba que él lo viera así.
El peli morado lo enderezo sobre su regazo, haciendo que Jimin quedará sentado para después impulsarse con sus brazos y sentarse, acomodándose correctamente en el asiento y recargando su espalda en el respaldo.
El peli rosa comenzó a mover sus caderas, completamente a propósito, cosa que le arrebato un gemido al tatuado.
—Dios, Jimin, eres tan caliente. Sigue moviéndote así.
El chico volvió a unir sus labios, dando inicio a un beso aún más sucio que los anteriores, más agitado, y con chasquidos haciéndose oír.
Jungkook aprovechó en medio del beso para desabrochar los pantalones de ambos, para proseguir a sacar sus miembros, dándole completa atención al de Jimin.
—Me encanta que siempre estés tan duro para mi.— Le dijo al peli rosa cuando se separaron, quien echó la cabeza hacía atrás.
—Sí, así. Jungkook, ah~—Jimin había llevado su frente al pecho de su chico, escondiendo su cara en la curvatura de su cuello, después Jungkook hizo un movimiento en su extensión que lo hizo morder levemente su clavícula.
Jimin bajó su mano para atender el miembro de Jungkook, que ya estaba goteando y parecía gritar por atención.
—Lo haces tan bien, Jimin. ¿Sabes qué también sabes hacer excelente?
El peli morado había aumentado sus movimientos, la mano del casi cumpleañero se movía errática debido a que estaba llegando a la cima, pues últimamente había descubierto cuanto lo encendía escuchar a Jungkook hablarle sucio durante lo que hacían.
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SNS II: Life Goes On|| Kookmin
Fanfiction>> Los años pasaron y la vida de Jimin y Jungkook tuvo que continuar, aún por separado. Dicen que una vez que haces click con alguien es imposible volver a conectar de esa manera con alguien, pero...¿qué pasa cuando tienes que aprender a vivir sin l...