SNS II: Life Goes On|| Kookmin

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En el momento exacto que los labios de ambos chocaron fue que Jungkook pudo comprender  porque estos le gustaban tanto en el pasado.

Besar a Jimin no tenía comparación, y se odió por ni siquiera tener cabeza para pensar en la culpa, pues todo su sistema estaba lleno de "Jimin" "Jimin" "Jimin".

No fue un beso dulce, más bien parecía que ambos estaban quitándose las ganas, era hambriento.

Movieron sus bocas en sincronía, maravillados con las sensaciones.

El peli rosa ahogo un jadeo cuando sintió su espalda ser presionada contra el lavabo, como si fuera una silenciosa invitación a sentarse sobre este.

Jimin quitó sus manos de la espalda de Jungkook para impulsarse, pero fue gratamente sorprendido cuando el cumpleañero lo tomó peligrosamente de los muslos, facilitando su objetivo.

Ahí fue cuando se separaron, tomando una gran bocanada de aire.

Se miraron fijamente, ninguno podía decir nada al respecto, y ambos temían por la reacción del otro.

—¿Uno?— Se atrevió a decir Jimin, rompiendo la tensión y provocando carcajadas de parte de Jungkook.

—Esto no está bien.— Dijo Jungkook, desviando su mirada a un lado.

—No te preocupes, mañana podemos hecharle la culpa al alcohol que claramente no tomamos.

El peli morado rió de nuevo, esta vez de manera nerviosa, mientras tenía una lucha mental consigo mismo.

Claramente no lo estaba haciendo por despecho, el que Yeonsang lo engañara no significaba que él haría lo mismo para regresarlo, nunca tuvo esa mentalidad.

¿Entonces por qué lo hacía?

No había otra respuesta más que la realidad: él era débil ante Jimin, porque amor de su vida solo hay uno, y por más doloroso que resultara él le había dado ese título al peli rosa hace mucho.

Por más que haya intentado amar con la misma intensidad fue imposible. Y no, no era su culpa, uno no decide de quien enamorarse ni la manera de hacerlo.

La mano de Jimin acariciando su cuello lo trajo de vuelta, dejando sus pensamientos.

—Mañana podemos hecharle la culpa al alcohol.— Decidió antes de unir sus labios de nuevo.

Jimin sonrió en medio del beso, y Jungkook aprovechó para introducir su lengua. Sus pechos desnudos estaban pegados, y el peli morado entre las piernas de Jimin.

Se habían vuelto a descontrolar.

Al cabo de unos segundos volvieron a separarse.

—Había olvidado lo bien que se siente besar.— Comentó Jimin.

—Habías olvidado lo bien que se siente besarme.— Corrigió el peli morado a escasos centímetros de su rostro.

—Oh por dios vi y oí demasiado.

La voz del hermano Jeon mayor hizo que Jungkook se separara.

—H-hyung...

—Jimin, ¿sabes donde puedo cambiarme?— Preguntó, ignorando lo que acababa de presenciar.

—Los cambiadores están aquí, hyung— Señaló el cuarto detrás de los lavabos.

—Gracias.— Dijo desapareciendo por la puerta de ahí.

—Deberíamos regresar con los demás— Dijo Jungkook una vez su hermano no estuvo ahí.

—Claro, es normal tener miedo estando a solas conmigo.