Odio

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Esa mañana Nieves tuvo que volver a casa por unas cosas cuando llegó y abrió la puerta se encontró con que los meseros aún estaban ahí.

-Qué paso? - estaba confundida y más ya que tenían sentados a Saúl y a Moisés enfrente como si fueran unos niños.

-Estaban peleando los dos, tuvimos que separarlos pero fue difícil, cuando creímos que iban a estar tranquilos volvieron a pelear y causaron un desorden.

Nieves miro a los meseros y luego a los dos, estaban con los ojos hinchados y totalmente heridos, ella sólo se empezó a reír de ellos.

-Por qué pelearon?, no me digan que fue por alcohol. - Nieves aún riendo se acercó a la barra y dejó sus cosas, cuando los miro ellos aún estaban callados.

-Qué tal está Bayas?, a todo esto por qué está en el hospital? - Moisés pregunto pero Saúl le dio un codazo. - Me dolió!, mira si sigues así te voy a meter una pu...-.

-Cuida tu lenguaje Moisés, además si está en el hospital es todo por tu culpa, no te diré que le pasó pero si te diré algo que espero que quede bien grabado en tu cabeza...ni tu propio hermano se atrevió a tanto. Saúl disculpa por las molestias más tarde hablamos y ustedes chicos pueden ir a casa les pagaré extra.

-Oh así está bien no se preocupe jefa, vámonos.

-Hasta luego!

Los tres salieron de ahí mientras que Saúl aún tenía la mirada baja, Nieves fue a preparar algo y cuando volvió sólo vio a Saúl sentado en el mismo lugar.

-Saúl no podemos cancelar nada, está noche te necesito por lo que mejor ve a descansar.

-Fue por su mala alimentación?, se cayó de las escaleras o algo parecido?

Nieves podía ver que aunque Saúl y Bayas no eran muy cercanos el aún se preocupaba por ella, se acercó a su oído y le dijo lo sucedido.
Cuando terminó el la miro y se notó cuando empezó a sentirse disgustado.

-No quiero más peleas, por favor no vayas con el.

-Pero...- .

- Ahora tengo que ir al hospital, mejor ve a aclarar tu cabeza y en la noche se arreglan.

Aún sin querer Saúl tomo sus cosas y salió acompañado de Nieves, los dos en cierto punto se tuvieron que despedir.

11A224 por otro lado aún estaba en la camilla, aun no se sentía bien y tenía muchos escalofríos.
Los enfermeros la veían raro pero ella no lo notó, sólo miraba su sangre, después de lo que pasó con Celrine no esperaba que su cuerpo se fuera a ver tan mal.
Cuando llegó Nieves ella parecía feliz, se sentó junto con 11A224 nuevamente, 11A224 en verdad se preguntaba por qué ella de todos se preocupaba por ella tanto como para perder su tiempo ahí.

-Nieves, habías dicho que tu hermano estuvo aquí, no sabía que tenías uno.

-Oh claro que lo tengo, es menor que yo y es muy lindo, deberías de verlo. - Nieves sonrió aún más mientras seguía haciendo cálculos en un cuaderno.

- No esperaba que fueras a tener uno, cuantos hermanos tienes?

-Solo el, si tuviera más hermanos menores sería difícil. Mi hermano es como Moisés, muy difícil de controlar.

11A224 sonrió y al hablar de Moisés recordó de nuevo que Nieves había dicho que el hermano mayor no había muerto.

-Entonces Damián el...me dijiste que no está muerto, entonces por qué se esconde de Moisés?

-Hmmm?, bueno...conocí a los hermanos por poco tiempo pero Damián no quería quedarse siempre en el mismo lugar, el esperaba avanzar y ser más importante, pero tarde o temprano todo se le iba a salir de las manos, su relación con Adela, sus amigos y su hermano, con todos era una persona distinta naturalmente iba a empezar a haber fallos sin contar que aún le falta mucho por aprender, podrá ser inteligente pero si quería subir a las grandes ligas debía de aprender más. Por otro lado Moisés siempre cumplió con su trabajo, en cierto punto puedes decir que fue más inteligente, el evitó relacionarse mucho con otros y siempre estuvo enfocado en su trabajo, pero los dos aún tienen que aprender muchas cosas, Damián debe de aprender a robar no sólo hacer planes y Moisés debe de aprender a hacer planes no sólo robar.

1487Donde viven las historias. Descúbrelo ahora