20🍼

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Se despertaron abrazados y con un pequeño peso extra en sus piernas que ambos sentían pero pensaban que había sido del otro.

Era Dylan que había estado durmiendo abrazado a uno de sus peluches en las piernas de los mayores. Había comenzado a chupar uno de sus dedos. Max se lo había quitado cuidadosamente mientras colocaba un chupón que había dejado en su buró la vez que había dormido el menor ahí.

Lo cargo y dejo que Peyton descansará más. Aún dormido el bebé, lo dejo en el sillón de la sala y lo tapó con una cobija.

Él se puso a hacer el desayuno para ambos y un tercero que sería parte de todo también. Estaba de buen humor, asi que decidió hacer hot cakes con fruta, Nutella y miel por si alguno le gustaría ponerle algo más.

Alguien lo abrazo desde atrás apoyando su mentón en su hombro. Era Peyton que no había despertado muy bien desde que el pequeño se había colado a su habitación.

Le dio un rápido beso y sacó un biberón de la alacena. Lo lleno de licuado de plátano con chocolate y despertó al pequeño que seguía succionando su chupón calmadamente con su amiguito abrazado.

-Despierta, mi vida. Ya es hora de desayunar.- lo cargó y lo acostó de nuevo en su hombro mientras veía como habría sus ojos lentamente y los tallaba con un bostezo que hizo que cayera su chupete.

-papi, dormir- se quejo.

-Pero hoy saldremos a jugar al parque, ¿No quieres ir?

-demasiado temprano.- se quejo de nuevo comenzando a patalear un poco.

-Tendremos que ir temprano, porque después el sol será más fuerte y podrías quemarte. ¿O será que no quieres ir por un helado después?

-¡Helado!- grito el pequeño que ahora hacia un esfuerzo por abrir sus ojos hinchados.

-Despues de beber tu biberón puedes dormir, y te despertaré cuando ya nos vayamos.- el menor en brazos asintió y abrió la boca para ser amamantado.

Peyton se quedaba embobado mirando como era alimentado un pequeño niño adorable por su novio.

-¿Quieres hacerlo tú?- le pregunto.

-¿Puedo?

-Por supuesto.- se lo entregó con cuidado y después de haberlo acomodado correctamente, comenzó a darle de nuevo su biberón con chocolate que al menor le gustaba tanto.

Estuvieron así por unos cortos minutos, pues el menor en realidad si había tenido hambre, solo no quería que lo despertaran.

Los mayores lo dejaban dormir mientras ellos desayunaban tranquilamente. Una llamada le llegó a Peyton desde la habitación en donde había dejado su celular.

Corrió a verlo y se maldijo por haber olvidado que tenía que entregar algunos papeles de un cliente que aún no firmaba. En realidad ese no era su problema, solo tendría que infórmale al cliente que no se haría el trato.

Avisó a sus jefes que no podía mandarles nada y colgó después de media hora de estar haciendo llamadas a varias personas para solucionar y verificar que todo estuviera bien. También para preguntar si podía estar totalmente libre al menos ese día, ya que quiera pasar el tiempo con su bebito y su novio cómo había deseado.

Le fue informado que si, pero que si sucedía algo no habría forma de que su día libre continuará.

Ya había acabado y ahora tocaba cambiarse para salir, y también al pequeño que seguía durmiendo.

Los dos mayores se cambiaron a algo casual. Max le tuvo que prestar algo para que se pudiera cambiar, y como su ropa no le quedaba bien y era más chica, le prestó ropa que no había utilizado nunca y en un principio pensaba regresar a las tiendas, pero se le había olvidado.

Peyton estaba haciendo una mini pañalera solo por si acaso y Max estaba cambiando al menor. Le puso un pañal nuevo y lo cambio de ropa poniéndole un conjunto de un pantalón de mezclilla y una blusa de color verde con dinosaurios.

Max cargó la pañalera y Peyton a Dylan que succionaba su chupete lentamente y con los ojos abiertos intentando cerrarse.

Primero tendrían que ir a acompañar a su bebé al parque, después comprarían algunas cosas y para finalizar se irían los tres a comprar un helado como lo habían prometido desde un principio.

Una oportunidad másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora