La vida continua tras fin de la Guerra del Santo Grial. Emiya Shirou ha perdido su fe en la humanidad, dejando sus armas y un sueño que solo le trajo dolor y sufrimiento atrás. Intentará vivir una vida normal, si es que alguna vez fue normal, pero...
Los sonidos de asfixia y estrangulamiento de 4 hombres mientras levitaban sobre el piso. Estos vestían de una cota de malla gris debajo sobre un protector de pecho, guanteletes, hombreras y botas blindadas de color oscuro y esmalte rojizo.
Sus armas se encontraban debajo de sus posiciones, mostrando a tres de estos hombres con vida, pero con agujeros donde deberían estar respetivamente ambos ojos ensangrentados y las cuencas completamente vacías, mostrando una obvia señal de tortura mirando como las extremidades de sus cuerpos se encontraban en posiciones incorrectas de donde deberían.
Con un gran Shock... pero con vida.
"Jajajajaj. ¿Puedes creer que estos tipos creen ser la cúspide de las autoridades? ¡JA! Que broma" Se burló un hombre de cabello blanco corto, usando una máscara de color blanco con espirales oscuras que cubría la totalidad de su rostro exceptuando un par de orificios que mostraba ambos ojos. Vistiendo una larga y gruesa túnica negra sobre un traje de batalla completamente oscuro y unas largar cadenas atadas en sus brazos.
"...."
"Oh vamos. Koki ya jugo al silencioso y misterioso conmigo y termino bien muerto... no tú también. Ambos somos parte de esto, deber de recordar que nos conocemos desde hace tiempo deberíamos ser más cercanos que eso" El hombre encapuchado contesto al silencio de su compañero que se mantenía oculto entre las sombras de los árboles que se negaba a tener una palabra con él.
"... Y tú debes de recordar que si yo quisiera ya estarías muerto. Reconoce tu lugar" el hombre se manifestó con un par de pasos mientras la luz de la luna mostraba lo que parecía ser un hombre de edad adulta, que portaba una característica mascara de color blanco con una luna roja posicionada en la frente, llevando una capucha la cual le cubría completamente su cabello. Usando lo que se podría considerar una especie de uniforme similar que el que usaba el otro encapuchado de colores oscuros, pero con bordes finamente colocados de color dorado y largas y gruesas botas que llegaban hasta sus rodillas
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"Haaa~ por eso no tienes amigos Vérért... pero bueno, tengo cosas que hacer aún... el ladrón del rayo fracaso por lo que tengo personas que tentar. Ellos se encuentran aquí, te lo dejo" El hombre encapuchado se despidió, pero su cuerpo se vio intervenido por su compañero enmascarado.
"...No olvides encontrar la caja que Muerte oculto en algún lugar en la tierra dominada por la descendencia de esos dos" Hablo Vérért permitiendo que el...se retirara mientras era absorbido de pies a cabeza por una distorsión en el espacio generada desde sí mismo.
"...Tu fracasaras" Uno de los demonios que se encontraban sometidos por la extraña presencia murmuro mientras finalmente su cabeza caía con cansancio.
