Fate DxD: El Regreso De Un Héroe

Arco IV: Infiltrados

Capitulo I

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Miedo.... Fue la segunda vez en toda su vida que sentía tal emoción.

Cabellos nevados... Ojo frio.

Cortar

Acuchillar

Golpear

Quemar

Lastimar

Espada

Espada.

Ojos dorados...

....y Arcoíris

Todo se había vuelto tan confuso....

Su ojo izquierdo azul brillante punzaba de dolor, fue completamente horrible cuando su sangre se deslizo escapando de su cuenca... en ese momento hubo un dolor eléctrico, insano y ardiente en su mente... ardió como las llamas mismas... mientras su vista cambiaba mostrándole sombras extrañas que no tuvo el tiempo de analizar.

El cielo brillaba con el más hermoso de los azules... con grandes pilares similares a las perlas que se extendían hasta los límites del planeta como si sostuvieran los límites del cosmos, el suelo brillaba por las calles que eran oro transparente de manera que reflejaba la pureza, la pulcritud y la tranquilidad. Con colinas donde se encontraban un gran número de mansiones de aspecto impresionante que salpicaban el paisaje con las distintas creaciones de su creador

Con grandes de multitudes que no se podían contar, todos vestidos de túnicas blancas con trompetas, cuernos y arpas cantando entre las calles y los jardines.

Mientras que....

En algún lugar de los cielos se encontraba un jardín donde Dios recolecto todas las flores de su creación y de los distintos dioses para sus hijos. En uno de ellos se encontraba una construcción de pequeñas dimensiones ligera formada por varias columnas que sostienen una cubierta con dos lados abiertos siendo el equivalente de un pabellón con hiedras y hierbas extendiéndose por todo el pabellón.

Se encontraba un hombre de aspecto perfecto y hermoso bebiendo tranquilamente el té, sus ojos azules brillaban con intensidad mientras tarareaba en sus adentros mirando los pergaminos y las cartas de su jurisdicción en el ejercito de los cielos.

Debajo de su asiento, casi tocando sus pies se encontraba un casco de acero rojizo y marcas negras de un dragón... dándole el título del Dragón de los Cielos. Para finalmente sonreír de una manera distinta como lo hacía al principio... era una sonrisa que contrastaba con su apariencia hermosa... y finalmente quemaba las 6 cartas con el símbolo de Belial, Grigoro, Mefistofeles, Samael y .... A-

"...¿Entonces por qué te fuiste solo así?" Una voz que no se esperaba había llegado... el hombre de ojos azules escondió las cartas que no alcanzo a quemar. El serafín de los ojos azules miro con tranquilidad a su hermano mayor mientras se acercaba a él.

El Serafín sabía a qué se refería... y el que se lo reprocharan en su cara como si fuera aun un niño le molesto. Por lo que azoto su mesa agitando su té manchándola en el proceso.

El Serfin miro a su hermano mayor... a diferencia de él que tenía una belleza perfecta, y a Miguel que tenía una belleza... peculiarmente femenina. Metatron tenía una belleza exótica, como si dos rasgos se encontraran en uno, sus cabellos blancos desordenados contrastaban con sus ojos como un cristal arcoíris, usando túnicas blancas como capa y guantes negros de una armadura ligera que cubría todo su cuerpo con marcas plateadas... en su cinturón se encontraba un símbolo de un león con una cinta rojiza atándola.