.-No se por qué, ni tampoco por quién. Lo único que sé es que no es por Costia y puedo vivir con eso para siempre.-Comentaba Luna colocando el bolso de cualquier manera sobre la mesa y en la gran habitación no tardaron en hacerse presente los "Shhh" que caracterizaban a la biblioteca y a Luna en el mismo contexto.
-Es por Clarke.-comentó Octavia mientras corregía el cuaderno de Nathan.-Desgraciada rata traidora.-Anoche la acompañó hasta la puerta de la residencia ¿Puedes creerlo?
-¡Mentira!.-Luna lo exclamó provocando nuevos "¡Shhh!" y una que otra maldición que también fue acallada.
-¿Pueden dejar de chismorrear mi vida mientras por lo menos estoy presente? y hagan silencio que no quiero que me corran como la ultima vez por tu culpa, Luna.-susurre mientras les lanzaba miradas asesinas a ambas.
-Desde un tiempo para acá has estado muy gruñona Lex, hablare con Costia para que lo arregle.-Luna comentó como quien no quiere la cosa.-¡Ah! si es cierto que le partiste el corazón anoche.
-¿¡Que!?.-Fue el turno de Octavia.
-Srta Blake, Jones y Woods, se me salen de la biblioteca, pero ya.
Voltee los ojos, por mas silencio que mantuviera con ese par, era completamente innecesario a la hora de compartir castigos.
Luego de despotricar contra las dos chicas y dejarles en claro que no quería que me siguieran acompañando a "estudiar" decidí hacerlo sola mientras me dirigía hacia el patio del campus, logre distinguir a Costia a unos cuantos pasos de mi. Parecía reacia a hablarme y sus ojos estaban un poco rojos.
-Lexa.-Me saludó con la voz ronca.
-¿Que quieres? ¿humillarme en el Pub no fue suficiente y vienes a hacerlo aquí también?.-mi tono salio mas tenaz del que pretendía y me alegró.
Últimamente estaba aprendiendo a ser mas valiente.
-Perdóname, Lexa.-Sus ojos castaños se cristalizaron y avanzó unos pasos hacia mi, quedando frente a frente.-No se que me paso anoche.
-Yo si se que te paso Costia, paso que te diste cuenta de que soy capaz de estar con otras personas a parte de ti.-Las lagrimas de Costia siempre habían sido mi debilidad, por más que recriminara que mi llanto la manipulaba, no podía dejar de pensar que siempre había sido al revés.-Pero anoche, anoche descubrí que puedo sentir muchas otras cosas a parte de las que sentí cuando estuve contigo, cosas que no me hacen sentir mal ni mucho menos culpable.
-Tienes razón, no debí hacer nada de lo que hice pero no pude soportar el verte con esa chica Lex. Y estas equivocada, porque con esa desconocida no puedes olvidar todo lo que hemos pasado juntas.-Me costo varios segundos captar que se refería a Hope, la chica que me había defendido en "La terraza" el día en que nos secuestraron a Octavia y a mi, casualmente me la encontré anoche en el mismo lugar, y victima de los tragos y el desinterés de Clarke, habíamos terminado besándonos en un rincón.-Por mas que quieras lograr sentir algo distinto con ella nunca vas a superar los años que estuvimos juntas.
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La Delincuente Perfecta
AléatoireA los 19 años de edad, Lexa Woods, hija de reconocidos padres en el mundo de la moda, y dueña de sobresalientes en la facultad de Derecho. Se verá envuelta en una escalofriante situación. Y es que la aparición de cierta rubia la hará conocer lo mas...