Olivia

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No sabía cuántos días habían pasado desde la última vez que estuve inconsciente, el hecho era que podía ser capaz de escuchar y sentir todo lo que me rodeaba a duras penas, a veces con mayor frecuencia... Otras con mucho menos y no era consciente de los días o las horas en las que permanecía inerte.

Acababa de despertarme y las nuevas voces extrañamente no le pertenecían a Nylah ni Finn, era medianamente consciente de que aquellos dos habían sido capaces de cuidarme en algún momento. Pero las voces que sonaban a mi alrededor eran distintas ahora... No era capaz de distinguir ninguna y extrañé escuchar las de mis compañeros al sentirme insegura y completamente vulnerable.

La impotencia comenzó a hacer eco dentro de mi al no saber cuánto tiempo habría pasado desde la última vez que fui consciente... Los recuerdos comenzaron a acelerarse en mi mente y las ganas de llorar de frustración provocaron un molesto sonido a mi lado, como el de una alarma.

Lexa.

Tenía que protegerla de...

Por un desagradable segundo no pude recordar de qué debía protegerla.

Poco a poco la sensación de asfixia se hizo insoportable, los desagradables recuerdos del agua entrando por mi nariz me arrastraron a la inconsciencia dejándome completamente inerte mientras voces alarmadas murmuraban cosas que ya no podía entender a mi alrededor.

Xxx

Luego de la discusión con Clarke, había pasado las últimas semanas encerrada en mi habitación estudiando o haciendo cualquier otra cosa, pero era inútil... No podía dejar de pensar en la forma en la que la dejé allí sentada. 

Aquél "No te quiero volver a ver" me perseguía por más rápido que intentara sacarlo de mi mente.

-I don't care who you are
Where you're from
What you did
As long as you love me...

-Estúpido reproductor y estúpida canción...-Me paré de la cama y lo apagué violentamente.-Estúpida rubia...

Y estúpidos Backstreet Boys.

Volví a acomodarme en la cama mientras terminaba de leer la misma línea del texto que había empezado hacía media hora.

No había visto a Clarke desde hacía unos dias y francamente pretendía estar bien con eso... Aunque evidentemente no era así. Me sentía fatal, porque lo último que quería era herirla y que todo terminara así, pero Clarke no me había dado otra opción.

Unos repentinos golpes en la puerta aceleraron mis latidos. Casi nadie visitaba nuestra habitación y el hecho de que tocaran quería decir que no era Octavia, por lo que...

-Lexa, soy Raven.

Decepción...

Me incorporé sin molesarme en cambiar mi pijama y abrí la puerta.

-Hey...-Saludé con cara de pocos amigos.

-Te ves horrible.-Me saludó Raven muy amablemente.

-Gracias.-Bufé abriendo más para dejarle paso y entró algo recelosa.

-Te estarás preguntando qué hago aquí...-Comentó y la seguí hasta sentarme en mi cama nuevamente sin mirarla siquiera.-O tal vez no.

-Siéntate.-Murmuré distraída y deseando que se fuera para volver a revolcarme en mi miseria.

-Bonita pijama de Harry Potter por cierto...-No me molesté en avergonzarme y me limité en rascarme detrás de la oreja distraídamente.-En vista de que pareces más muerta que viva... Supongo que no lo sabes, o tal vez si.

La Delincuente PerfectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora