𝗟𝗮 𝗵𝘂𝗺𝗮𝗻𝗮 𝗱𝗲 𝗛𝗮𝗱𝗲𝘀.

La perdí.

Hades

-¿Dónde están?- entre azotando las puertas del palacio olímpico.

-Ellas están en un lugar seguro, iniciarán una vida nueva y feliz- contesto Zeus.

-DIME DONDE ESTAN PARA IR POR ELLAS.

-¡Basta Hades!- hablo Hera -Alyssa decidió dejarte en paz para que tú pudieras seguir ocupandote de tu esposa- su mirada era de odio.

Me habían quitado a mi humana, cuando por fin la tuve me la quitaron, la regresaron a la tierra.

Entro Eros al palacio y lo voltee a ver, no dude ni un segundo y lo sujete de la ropa.

-Te exijo me que digas dónde están mis niñas- ordené

-No- su voz era seca y de molestia -Ya les hiciste suficiente daño Hades, el amor no se trata de eso- suspiró -Ellas están seguras, comenzarán una nueva vida sin ti así que tú has lo mismo-

Lo solté, quería golpearlo pero un ardor en mi pecho me hizo detenerme, me hizo querer estar muerto, si no podía estar con mi humana, no quería estar con nadie más.

-Tienes prohibido ir a buscarla, la cagaste, ella te vio con Persefone y me rogó para que la dejara irse.

Mi mano tocaba mi pecho para retener a mi corazón que ardía de dolor, sentí el mismo dolor que recorrió mi cuerpo el día que Mente se fue, la diferencia es que, la escencia de Mente sigue en el inframundo, conmigo... Pero Alyssa ya no.

-Es que yo la amo...- por primera vez, llore frente a todos.

-El amor duele Hades, pero aprenderás a vivir con eso- hablo Hera.

-ME NIEGO- grité y salí de ahí.

Me fui apresurado, no tenía un rumbo fijo, no tenía un plan, solo quería olvidarme de este dolor y de la humana, mi preciosa humana.

💀💀💀

Terminé frente al hogar de Dionisio, el Dios del vino estaba afuera en su jardín recolectado uvas.

-Hades, ¿Qué te trae por aquí?.

Me quede pensando unos minutos, voltee a ver las Parras llenas de uvas.

-Vino, quiero 10 barriles de tu mejor vino.

-Hades si es para ti solo no te daré...

-ES UNA ORDEN DIONISIO.

El Dios solo me vio extrañado y me obedeció, me dió 10 barriles de sus mejores vinos, de uvas, moras, blancos, rojos y rosados.

-Gracias- me fuí de ahí sin esperar a que el me dijera algo.

-Recuerda lo que dicen del vino Hades, es momentáneo el placer que te dará.

Lo ignore, lo único que deseaba en ese momento eran dos cosas: A mi humana y perder el conocimiento para soportar el dolor.

Cómo dueles Alyssa.

💀💀💀

Mi llegada al inframundo fue rápida, baje y le indique a Caronte que bajará el vino y lo pusieran en el comedor listo para ser servido cuando yo quisiera.

Me serví un poco y el sabor embriagante a las uvas recorrió mi garganta calentandola, dejando un sabor amargo y dulce a la vez que me hacía olvidar por un momento el dolor que sentía en mi pecho.

-Hades, no creo que esto sea una buena idea- Caronte se acercó a mí, preocupado.

-YO DECIDO QUE IDEAS SON BUENAS O NO- le grité.