Sonata de invierno (l.s)

XVI: Dejame amarte

Louis separa sus labios de Harry un momento para tomar aire. La noche es fría y un escalofrío recorre su pecho al verlo descubierto hasta sus pectorales, no tiene idea en que momento Harry abrió su camisa.

Sus pupilas dilatadas y sus labios hinchados hacen que Harry pase su lengua sobre la mandibula de este y Louis se estremezca en placer, con su mimebro erecto dentro de sus pantalones y sintiendo el del contrario debajo de su pierna derecha.

Sus respiraciones son agitadas y Louis desea más, no tiene idea de que es lo que desea, él solo desea calmar estas ansias que siente.

—Louis paremos— pidió Harry luego de dejar una series de besos por su pecho.

Con los ojos cerrados, Louis negó —Ayúdame— suplicó.

Harry levantó su mirada y le miró a sus ojos —¿Cón qué?— preguntó confundido.

El duque estaba sonrojado y agitado, no tenía idea de que quería pero los besos que Harry dejaba en su piel ardían y él estaba necesitado de él.

—No lo sé— respondió sincero —Tengo calor, siento calor en mi interior— pausó —Me duele acá— señaló su entrepierna que estaba siendo apretada por la tela inflexible de su pantalón.

Harry pudo verlo, el joven duque tenía un erección, ¿le  estaba pidiendo que lo tocara? Harry no podía hacer eso, no, jamás.

Harry quitó el flequillo de sus ojos —Ve al baño, debes atenderte— explicó.

Louis negó.

Harry lo puso de pie y con cuidado y cariño le acarició las caderas —Ve allá, hazlo.

Negó de nuevo —No sé hacerlo, ayudame.

Harry se negó —No debo tocarte Louis, no es correcto— respondió.

Con su mirada confundida Louis bajó y le dio un beso para animarlo —¿Por qué?

Harry subió sus manos y las ajustó en la cintura del menor —Porque no eres mío— susurró.

De un impulso, Louis no sabe porqué lo hizo, tomó el cierre de su pantalón y lo bajó, dejando la prenda hasta sus muslo, poniendo a la vista su erección cubierta por su ropa interior.

Harry por su parte no sabía qué hacer, solo tenía ahí al joven duque sonrojado, con su pecho un poco descubierto y su pantalón por sus muslos, deseaba tocarlo, ayudarle a quitar esa mirada desesperada que tenía el menor en su rostro.

—Yo soy tuyo— respondió Louis.

Harry negó —Lou...— susurró.

Y sin pensarlo demasiado, Louis bajó el resto de su pantalón para sentarse de nuevo sobre el regazo del mayor mientras lo miraba con amor.

Harry sentía cosas por Louis, tal vez no era amor aún pero le quería, le quería lo suficiente como para desearlo, muchas personas desean a otras sin siquiera quererles pero Harry al menos lo hacía, se preocupaba por él y quería cuidarle, ayudarle.

Louis tomó el rostro y le atrajo a un beso profundo, ocasionando que Harry se lo devolviera con desesperación.

—Ayudame— pidió de nuevo.

Y por primera vez no tuvo que repetirselo al príncipe, este tomó automática su miembro con su mano y Louis se estremeció. 

Sin decir nada, solo acariciando la espalda de Louis y besando su cuello, atendió aquella erección. Louis dejaba salir de sus labios suaves suspiros mientras su corazón latia rápido.