XXXV: La noche abrazó el amor

2K 237 287
                                    

Parte II de II


—¿Está enojado?— lo miró Louis con curiosidad.

Harry tensó su mandíbula —Sí.

Louis sonrió antes de cubrirse con la sábana —Que bien, buenas noches— tuvo que cubrirse la boca bajo la sábana para que Harry no escuchara que se estaba burlando.

Sin embargo, sintió un peso al costado de la cama antes de ser empujado hacia adentro, abriendose espacio a su lado.

Louis quitó la sábana y observó como Harry sin preocupación alguna se acostaba a su lado en su cama.

—¿Va a dormir acá?— preguntó con confusión y luego sonrió —¿No dijo que dormiría en el sofá?

Giró su cara hacia Louis molesto y tomó un poco de la cobija —Soy un príncipe, claro que dormiré en la cama.

Louis rió —¿Ah de verdad? ¿No lo está haciendo porque está celoso?

Una risa escandalosa salió de Harry —¿Yo? ¿Celoso?

Asintió —Lo está, ¿Acaso tiene miedo de que me escabulla en la noche y vaya en busca de Christian?

El principe le miró seriamente antes de responder —No, sé que usted no lo haría porque si ese hombre le gustara en lo mínimo, habría huido con él antes de casarse.

—¿Y cómo está tan seguro de eso?

Simplemente suspiró —Porque usted prioriza su corazón y sus sentimientos y no deja que nadie le diga que hacer.

Louis no supo por qué su corazón se agitó.

Harry le dio una mirada dulce y nostalgica antes de ponerse de pie y darle la espalda para desvestirse.

Louis lo miró quitarse el saco del traje y ponerse la camisa de la pijama antes de sentarse en la cama y quitarse sus pantalones para reemplazarlos con los cómodos y luego volvió a recostarse junto a él.

Se miraron por unos segundos antes de Louis inclinarse a él y darle un beso en la mejilla.

—Tiene razón, por eso mismo no debe ponerse celoso.

El corazón de Harry se emocionó y no pudo evitar poner sus brazos alrededor de la cintura de Louis y abrazarlo, sintiendo el aroma del cabello de su consorte.

—¿Qué puedo hacer para que sea plenamente feliz esta noche?— le preguntó Harry con cariño.

Louis sólo frotó su mejilla con el pecho del príncipe —Sólo quédese a mi lado.

Harry asintió antes de abrirse espacio en la cama y dejar que Louis se acostara mejor.

La pierna del castaño estaba rodeando la suya mientras podía sentirlo respirar cerca de su cuello, se sentia tan bonito, ambos cuerpos relajados, sin preocupaciones, sin miedo, sólo dejándose llevar por los latidos de sus corazones emocionados que deseaban unirse por el amor.

Pudo sentir a Louis quedarse dormido a su lado.

—Louis—mencionó entre susurros y él abrió un poco sus ojos cansados mirándole con duda, así  que suavemente con su mano movió el flequillo de Louis —Usted ha sido luz en mi vida, no se imagina lo importante que es para mi, si yo pudiera darle hasta mi vida se la daría— confesó en la oscuridad de esa habitación entre susurros —Hay cosas que han pasado que no son fáciles de explicar pero créame que le estoy hablando con mi corazón al decirle que lamento como lo herí hace unas noches.

Sonata de invierno (l.s)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora