Secuela de la novela "The Teacher"
Después de haber sido expulsado del internado universitario más prestigioso del país y verse vuelto en un escándalo, Darrell Bloom se ve obligado a continuar su vida en un lugar completamente distinto: La universi...
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¿Por qué terminó de esa manera? Quizá, como siempre, Luke se hacía la pregunta incorrecta... la respuesta estaba mucho más atrás, ahí donde tenía que voltear a mirar si quería comprender lo que ocurría en ese mismo instante en el que no estaba seguro de qué lo confundía más, si su propia moral pidiendo a gritos que se detuviera o los labios que contra los suyos lo estaban haciendo perder la cabeza. La verdadera pregunta era... ¿cómo comenzó? Y eso sí podía responderlo mucho mejor, aunque algunas partes ya estaban algo perdidas en su propio consumo de alcohol y en el movimiento de esas manos que lograban desconcentrarlo. Justo cuando la razón quería volver a dominarlo, era azorado por esa forma tan violenta de besar que tenía Bruce... estaba seguro de que estaba temblando, pero también de que era él quien lo tenía aprisionado al sostener su rostro con ambas manos; solo se quejó cuando empujaron algo que cayó al suelo, se escuchó como si se rompiera, aunque ninguno de los dos sabía qué había sido.
—Eres un imbécil —escuchó a ese idiota regañarle, provocando que frunciera el entrecejo porque se había atrevido a detenerse.
—Cállate, Bruce —se quejó con un gruñido mirándolo por un efímero instante, hasta que llevó la mano hacia atrás para atraerlo con la misma fuerza con la que se dejó ir contra él por haberle respondido de esa manera.
Cuando trataba de rememorar cómo es que había alcanzado el punto en el que al parecer perdió la cabeza, se encontró con ese momento de la noche que ahora mismo no quería que se cruzara por su mente ni por casualidad. La culpa había sido ahogada con los estragos de muchas emociones más, pero era justo admitir que el comienzo fue en lo que creyó que sería el final de su fatídica noche, porque siempre resultaba de esa manera. De alguna forma el hecho de que, tras el beso que había esperado por lo que parecía ser toda su existencia, se encontrara con que "no había nada" le pareció deprimentemente real... ¿qué esperaba? Luke se consideraba alguien excesivamente realista, aplastando sus propias expectativas sin remordimiento, maltratando a sus fantasías por llamarlas inverosímiles e imposibles... para él no fue extraño decepcionarse a sí mismo, sinceramente se dejó aplastar por algo que creyó que sería diferente y para él eso era lo mejor, lo más normal... lo que "sí tenía sentido".
Él estaba listo para que el resto de su noche fuese sonreír a medias, mirar al resto embriagarse y mirar a Harvey con cariño a pesar de que inclusive se cuestionaba si él había hecho algo mal... porque esa era la respuesta usualmente, Luke podía creer que él había cometido un error, pero no los demás. Para Harvey al parecer fue distinto... el cambio que miró en él fue quizá lo que terminó por hundirlo, porque se mostraba mucho más confiado y tranquilo, mucho menos nervioso y se sentía con toda la libertad de sonreírle como si no ocurriera nada más. Creyó que tendría algo de tiempo para asimilarlo por sí mismo, que al menos estarían juntos el resto de la noche para que Luke continuara experimentado con lo que "era y no fue", pero solo recibió un golpe tras otro en el que finalmente se decantó por ceder al alcohol al que tanto se había negado porque no volvieron a estar solos.
