De nuevo he exagerado un poco con el consumo de alcohol, pero en definitiva, Evie me rebasó con creces.
Sé encuentra durmiendo profundamente en el asiento trasero del auto de Zach mientras yo finjo estarlo en el asiento del copiloto. Puedo escuchar su respiración irracional y con el tiempo, he logrado descubrir que eso sucede cuando está molesto, lo que no entiendo es ¿por qué está molesto?
¿Porque bailaba con ese chico mientras lo provocaba a él con la mirada?
¿Porque le tocó nuevamente ser mi niñera mientras Alice se iba a disfrutar con Sebastian?
¿O porque simplemente comienzo a ser un verdadero dolor en su culo y esta harto de mí?
Honestamente, saberlo me da miedo.
El auto se detiene de pronto, así que asumo que hemos llegado, pero no puedo siquiera dar una pequeña señal de que estoy despierta o su enfado aumentará y no me llevará él a mi habitación, y es algo que anhelo en el fondo de mi alma.
Este estúpido enamoramiento que tengo por este chico me hace cometer locuras.
Zach apaga el auto y suspira. Por un segundo creo que va a bajarse del auto, pero de pronto siento una caricia suya en mi mejilla que luego se mueve hasta mi labio inferior.
Toma todo mi auto control continuar fingiendo que estoy dormida.
¿Qué demonios está pasando?
¿Por qué él me acaricia de éste modo?
Él sonido de una motocicleta al aproximarse lo hace separarse y bajar del auto. Escucho voces, aunque no logro entender muy bien lo que dicen. Al cabo de unos segundos, el sonido de un auto se une y puedo reconocer una voz femenina entre dos masculinas.
—De Alina me encargo yo —entiendo a la perfección lo que dice Zach ya que lo ha dicho al abrir la puerta del asiento donde estoy—. Tú encárgate de Evie
No tengo idea de a quien demonios se lo dice, pero eso carece de significado cuando siento como me rodea con sus brazos y me toma en ellos con fragilidad. Mi cabeza queda convenientemente en el hueco de su cuello y aprovecho ese instante para disfrutar de su delicioso olor que parece ser una mezcla de menta con algo más que no logro descifrar, pero que simplemente me encanta.
Él se mueve con rapidez pero con el suficiente silencio para no alertar a mis padres de nuestra llegada, hasta que más pronto de lo que habría querido está dejándome sobre mi cama. Me acomoda con cuidado y acomoda mi cabeza con sumo cariño, lo que vuelve de nuevo a tomarme por sorpresa, y cuando su dedos vuelve a acariciar mi labio inferior y su aliento cálido cae sobre mi mejilla, no puedo soportarlo más y abro mis ojos.
Zach abre los suyos en demasía y retrocede con rapidez como si estuviese viendo al mismo demonio.
—¿Estuviste despierta todo éste tiempo? —me cuestiona luciendo enfadado.
—No, me acabo de despertar —miento—. Necesito ir al baño —replico escabullendome hacia éste.
Me recuesto contra la puerta del baño y cierro mis ojos. Escucho la voz de Alice en susurros, también la de Zach. Me quedo allí hasta que ya no escucho nada y finalmente regreso a la habitación para encontrarla vacía, a excepción de Evie que duerme plácidamente en mi cama.
Veo mi IPhone sobre mi escritorio y recuerdo que él me lo quito en mitad de la fiesta.
Parecía celoso y al pensar en ello, una sonrisa se forma en mis labios. Sonrisa que desaparece en cuanto me doy cuenta que Zach también ha mostrado celos y mucho más abiertamente, con respecto a Alice.Dejo caer el teléfono de mis manos, sintiéndome triste.
No sé porque de pronto he rememorando el recuerdo de esa noche, sobre todo porque esa misma noche me prometí a mi misma que dejaría de pensar en él, aunque en el fondo ni yo misma me creí eso.
Llevo pensando en Zach desde que tengo memoria.
¿Y quién podría culparme?
Es rubio, alto, con esos hermosos ojos azules y una sonrisa tan perfecta que lo hace tener la imagen de niño bueno que tiene a la mayoría de chicas babeando por él, excepto a mí hermana, que al parecer, le va muchísimo más lo del chico malo.
No es que Sebastian lo sea, aunque sí que se ha comportado como un idiota con ella, pero en el fondo, espero que eso de para más. Quizás de ese modo, Zach pueda ver un poco más allá y darse cuenta de que existo.
Vuelvo a revisar mi teléfono, para encontrar de nuevo la publicación que hice ya hace un tiempo en mi instagram. Una fotografía junto a Alice y Zach, donde anuncio abiertamente que le quitaré el novio a mi hermana.
Alice pensó que era en juego, Zach ni siquiera dijo algo al respecto, mientras que yo estaba hablando tan en serio que parece ridículo.
Es ridículo.
Puede que al principio ninguno de los dos se viera como algo más que amigos, pero desde que Sebastian llegó, Zach cambió por completo.
Me salgo de instagram y voy a WhatsApp para ver que no tengo noticias de Alice, así que supongo que le fue mejor de lo que creyó con Sebastian.
Aún es un poco temprano, pero creo que lo mejor es ya subir a mi habitación antes de que mamá o papá bajen y me pregunten por ella. Después de todo, no les dije que ella saldría. Primero muerta que interrumpirlos cuando están solos en su habitación. Esa lección la aprendí hace dos años cuando Alice y yo decidimos llevarle el desayuno a la cama a mamá por su cumpleaños.
Creo que después de eso, ambas aprendimos a jamás interrumpirlos cuando su puerta está cerrada y ellos aprendieron a comenzar a hacer uso del pestillo.
Apago el televisor y apago las luces, dejando solamente la lámpara junto a la escalera encendida. Estoy a punto de subir cuando escucho el característico sonido del jeep de Zach, lo que me confunde.
¿Qué hace él aquí?
Me acerco a la ventana y descorro la cortina para verlo estacionado en la acera. El auto está apagado y no puede verse nada dentro por la lejanía y por los vidrios polarizados. Segundos después, veo como Zach sale del jeep y lo rodea para abrir la puerta del copiloto, dejando ver a mi hermana dentro de éste.
¿Qué demonios...?
Siento mi cuerpo temblar a causa de la confusión, pero sobre todo de la ira cuando veo que Zach la sostiene entre sus brazos y comienza a caminar hacia la casa con ella en brazos.
Retrocedo un par de paso para que no me vean husmeando, sintiendo la imperiosa necesidad de abrir la puerta y exigir una explicación. Pero ¿con que punto?
Pensarían qué estoy loca.
Zach y yo no somos nada, ni siquiera nos hablamos y Alice, ella parece triste por algo.
Me acerco con sigilo a la puerta y pego mi oído en ella, intentando oír algo de lo que dicen.
—De verdad quiero matarlo —escucho decir a Zach.
¿Habla de Sebastian?
—Lo sé, pero no lo harás —dice Alice—. No es tu responsabilidad defenderme siempre Zach
—Claro que lo es Alice. Te quiero y me importas muchísimo, eso me da derecho a partirle la cara a cualquiera que se atreva a lastimarte de éste modo
Retrocedo, sintiendo sus palabras como una maldita bofetada.
Él la quiere.
Ha dicho que la quiere.
Mis ojos se llenan de lagrimas y no quiero seguir escuchando lo que Alice tenga para decir. Subo las escaleras con rapidez y sin hacer un solo ruido ya que estoy descalza, me refugio en mi habitación, sintiéndome realmente mal.
Esto me pasa por tonta, por estúpida, por creer que una bonita sonrisa de parte de Zach hace dos años en mi cumpleaños significaba otra cosa más que él siendo amable, porque eso es todo lo que él ha sido conmigo desde entonces: amable.
Es amable con la hermanita de su mejor amiga, porque no le queda otra opción.
Me cuida, porque soy la hermanita de la chica que le gusta y quiere impresionarla.
Todo ha sido por ella siempre, ni una sola vez ha tenido un gesto genuino hacia mí solo por ser yo.
Una punzada de decepción se instala en mi pecho, que sumado a la tristeza incrementa mis ganas de llorar, pero me niego a hacerlo. Me niego a derramar siquiera una lagrima por un idiota que no puede ver más allá de sus propias narices, que desperdicio años saliendo con un montón de chicas diferentes, dejando a la que obviamente quiere a un lado, ¿y para qué?
¿Pará decírselo cuando ella decide estar con otro?
Pues espero que Alice jamás le corresponda esos sentimientos y que él pase a ser tan miserable como yo lo he sido hasta hoy, porque en definitiva mi estúpido enamoramiento por Zachary Lewis se acaba hoy.Bienvenidas sean baby girls a la segunda entrega de la serie Mil razones.
Cómo les dije, esta entrega se iba a centrar en otros personajes, pero seguiremos muy de cerca lo que sucede con Alice y Sebastian.
También tendremos situaciones incómodas, mucho drama, un toque de humor y ciertas escenas spicy que no tuvimos anteriormente porque bueno, Alina es diferente a Alice en varios aspectos 😏😏
Espero les guste y muchísimas gracias a todas por estar aquí hoy y tomarse el tiempo de leer.
Las amo 10000 ❤️
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Mil razones para estar contigo. Serie Mil Razones 2
Ficção AdolescenteAlina no tiene ningún plan para su vida, para ella, la vida se vive, no se planea. Zach quiere viajar y conocer el mundo en cuanto acabe la secundaria, aunque últimamente, algo lo ha hecho replantearse sus planes. Alina ama hacer que los chicos se...