Capítulo 23
Acabamos de salir del psiquiátrico y camino por el bosque con Thaniel para buscar la carretera. Tropiezo con una piedra, pero no llego al piso ya que Thaniel coge rápida y fuertemente mi mano.
—Si te caes no te voy a recoger— no suelta mi mano y seguimos caminando—. Por cierto, todos ya saben que viniste a conocer a Bear.
—Gracias— silencio—. Mira, florecitas— le señalo unas flores que están sembradas en el suelo.
—Sí, florecitas— finge emoción.
Me suelto de su agarre y me agacho en el suelo para arrancar las florecitas. Me levanto con ellas en mis manos y se las extiendo a Thaniel.
—Ten, al menos no las robé del cementerio.
—¿Qué crees que haces?
—Te estoy regalando flores.
—Eres una ladilla.
—¿Ladilla?
—Un fastidio, eso eres.
—Toma las flores y cállate— él finalmente las coge y las guarda de mala gana en el bolsillo de su jersey.
—¿Feliz?
—Sí, creo que es primera vez que te regalo algo— me engancho de nuevo a su brazo y caminamos otra vez.
—Te arreglaste el pelo.
—¿Lo has notado?
—No soy ciego.
—A veces no te das cuenta de lo que pasa conmigo.
—Sí me doy cuenta, pero solo me reservo mis comentarios.
—Umh. Pues sí, lo corté cuando estaba en casa de mis padres y ayer Diana me lo arregló.
—Te lo pintó de negro.
—¿No te gusta? A mí sí.
—Incluso hasta pareces mujer.
—Te estás pasando de la raya.
—Bueno... te ves linda.
—Gracias Thaniel, tú también eres lindo.
—Lo sé.
—Y egocéntrico.
—También lo sé.
—¿Por casualidad hay algo que no te guste de ti?
—Déjame pensar... me gustan mis ojos azules, mi cabello rubio, mis tatuajes... mis 22 centímetros...
—¡¡Thaniel!!
—¿Qué? Incluso soy bueno en todo lo que hago ¿Por qué algo no me gustaría de mí?
—Todos tenemos algo que no nos gusta de nosotros mismos.
ESTÁS LEYENDO
Caos Perfecto
Mistero / ThrillerThaniel y Ryder Evans, hermanos y cómplices. Todos pensaban que ellos eran el verdadero peligro, pero el verdadero peligro era ella... Vivian Wals, una experta manipuladora que no conoció límites. Vivian se metió en su casa, en sus camas, y por si...