Día dos en Lima, Ohio.
22 de diciembre.—¿Que dicen si hoy salimos a un bar?— propuso Jake mientras estaban sentados en una mesa que estaba en el parque de la mansión.
Ayer fue un día muy bueno que pasaron con la familia de Santana. Volver a verlos les hizo muy bien a ambas.
Brittany siempre fue una integrante más de la familia, prácticamente desde que se conocieron. Maribel y Alfonso la quieren como a una hija más.
El problema estuvo cuando llegó la noche y se dieron cuenta que tendrían que compartir la cama, pero rápidamente el problema se convirtió en beneficio cuando se acostaron y durmieron abrazadas, ya que dormir con la otra, las relajaba.
—¿Jakecito no tenes cómo diez años vos?— bromeó Britt.
—Veintidós, gracias— respondió fingiendo molestia.
—No sé, Jake. No quiero molestar a papá y mamá para que cuiden a las chicas, ya las van a cuidar cuando Britt y yo volvamos a casa.
—Tani, tampoco te estoy diciendo de salir hasta las ocho de la mañana— rió— Solo un rato, tomamos una cervezas y volvemos.
—No sé... ¿Britt?
—Supongo que no tenemos otra opción— sonrió y le guiñó un ojo a su esposa, haciéndola sonrojar.
—Vamos, López ¿te hace sonrojar un guiño de tu mujer?— rió Jake.
—Cuando tengas una esposa tan hermosa y sexy como la mía vas a ver que te sonroja todo lo que hace y dice— fue el turno de la rubia para sonrojarse.
—No entiendo su relación— alzó las manos en rendición.
—Es una relación normal de dos personas que se aman Jakecito— rió Britt.
—Igual tranquilo, a veces ni nosotras entendemos nuestra relación— bromeó mirando a la rubia.
Después de mucha insistencia, el menor de los López las logró convencer de salir a un bar junto también a su hermana Emily.
La noche iba a ser tranquila, irían al bar, estarían un rato, tomarían un par de cervezas y después volverían a la casa.
El único problema era que Jake no sabía la situación de las brittana, y que si no las veía juntas iba a sospechar.
Generalmente cuando salían con amigos o alguien, ellas dos siempre estaban sentadas al lado o encima de la otra, siempre estaban abrazándose o besándose, siempre... siempre estaban amándose.
Así que ambas cuando por fin llegaron al lugar, intentaban sacarle conversación para que no se de cuenta de nada, lo que le daba gracia a Emily.
—¡Y...— contaba riendo Santana— y resulta... resulta que Kitty era su ex!
—¡No me digas!— dijo Britt riéndose, ya que ella no sabía nada— ¿Cómo reaccionó Dani?
—Se notaba su incomodidad— respondió— Pero bastante bien.
—¿Entonces Dani es tu nueva amiga?— preguntó Jake.
—Sip.
—¿Y Kitty es su ex?— preguntó Emily.
—Sip.
—Wow— dijeron los dos hermanos menores.
Después de un rato más de seguir hablando de trivialidades, Santana y Jake se fueron a buscar otras bebidas a la barra, dejando a Emily y Britt a solas.
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No me dejes- brittana
FanficUn matrimonio que se desgastó a pesar que se aman con locura. ¿Lograrán luchar para recuperarlo?