IX

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Últimamente Jungkook disfrutaba pasar las tardes a orillas del lago, le gustaba observar los nenúfares flotando en el agua y a los patos nadando entre aquellos, era un lugar que le hacía sentir en paz. Jeon disfrutaba demasiado de la silenciosa compañía de Kim, alzó su cabeza y sonrió al ver al joven que parecía luchar para no quedarse dormido, tras varios segundos observándole abrió su libreta, admiró al joven una vez más y decidió plasmar aquella imagen sobre tinta. La imagen de un lindo Taehyung de mejillas infladas que luchaba contra el sueño; si bien Jungkook no era un maestro en el arte del dibujo, puso todo su esfuerzo en retratar cada milímetro de la desbordante belleza de aquel y cuando estaba cerca de terminarlo escribió en una esquina de la hoja. "Kim Taehyung. 10 de noviembre de 1910."

Taehyung se había quedado dormido y Jeon ahora llevaba más de treinta minutos sosteniendo la cabeza de Kim sobre su hombro, aunque sentía este doler, no le tomó importancia, pues amaba la idea de poder observarle de cerca sin sentirse agobiado, a Jungkook le gustaba Taehyung, no solo físicamente, si bien, era guapo, varonil y elegante, a su vez; era tierno, romántico, algo torpe, era irreal, como si hubiese sido creado para ser el personaje principal de una novela romántica como las que solían leer juntos en la biblioteca.

—Si tan solo amarte fuera permitido...- lamentó Jungkook.

. . .

Domingo.

Otra vez era el día del mes donde gastaban toda la tarde jugando al criquet, eran aproximadamente las once de la mañana, todos los amigos cercanos de la familia ya habían llegado, la mayor parte se encontraba en los jardines hablando con los padres de Taehyung, las pequeñas hermanas del ciego aún no bajaban de su alcoba, pues gastaban el tiempo necesario en verse presentables, Taehyung , en cambio, se encontraba en la biblioteca esperando a que el chico de su misma edad entrara por aquellas puertas y le llevase a los jardines, aunque si era honesto, no tenía muchas ganas de socializar, pues había encontrado un libro que le tenía entretenido desde la noche del día anterior.

— Disculpe, tuve que arreglar mi chaleco— anunció Jeon al entrar, quitaba los hilos del chaleco al cual le había colocado su primer parche.

— ¿se ha arruinado?

— Oh no, solo fue un pequeño inconveniente ¿deberíamos salir?

—Espera— pidió él ciego— quedémonos acá un rato, no les hará falta nuestra compañía.

Ambos sonrieron a la vez, Taehyung con su bella sonrisa cuadrada y Jungkook mostrando sus hermosos dientes incisivos;  ambos ignoraban el hecho que tras aquella "petición" de Kim se escondía la nula intención de que ninguno quería alejarse del otro. Jungkook se sentó en el suelo, recostando su cabeza sobre la piernas de Taehyung y dejando a aquel acariciar las sedosas hebras de su cabello.

- Taehyung... ¿sabes algo sobre tu doctor?

- Mañana mis padres saldrán del país para hablar con él.

- ¿Estás nervioso?

- No realmente, han hablado con tantos doctores desde que tengo memoria que ya no me emociono precipitadamente.

- ¿y que tal si este puede curarte? Si eso pasa ya no necesitarás de mi... me tendré que ir.

- Jungkook si que eres un imbécil. Incluso si logran curarme seguirías conmigo, mon chérie.

Jungkook se sonrojó mientras a la vez se llenaba de duda, por un lado estaba feliz, pues él chico no le dejaría en un futuro, por el otro, sentía curiosidad por el término que había usado, definitivamente era otro idioma, uno que desconocía.

El lugar en el que estaban ambos se llenó de un silencio para nada incómodo, era tan callado y tranquilo que incluso podrían oír un mosquito volar, Jungkook amaba estar con Taehyung, y Taehyung amaba estar junto a Jungkook, se sentían seguros el uno con el otro, como si nada más importase aparte de ellos. Las puertas se abrieron sin aviso, Jungkook se estremeció al ver a los hombres de aquella fiesta entrar, pues por alguna razón sentía que tenía en sus manos un secreto muy peligroso.

—¿Cuándo saldrán? Tu mamá nos ha mandado por ti— formuló el de mejillas regordetas y cabello negro.

— Saldremos justo ahora— respondió Kim.

— Bien, les esperaremos afuera, esta vez no pensamos dejarte ganar, por cierto, alguien está esperando por ti desde hace rato así que arréglate un poco— dijo Park y tras eso los hombres se fueron.

—Lo mejor será que salgamos.

. . .

La misma mujer de aquella vez... la pálida de estatura mediana y una cara casi perfecta tomaba toda la atención de Kim. Jungkook sintió celos.

Sintió celos de verlos reír, bromear, murmurar, sintió celos del simple hecho de que no era él con quien reía en ese momento.

— Disculpa ¿Jungkook?— interrumpió  una voz ya conocida, Jeon alzó la mirada y se encontró con uno de los amigos de Kim, él señorito Park— ¿Podemos hablar?

— ¿Hablar? ¿Nosotros?— dijo Jeon torpemente— claro que podemos ¿necesita que le traiga algo?

— ¡No, no! Quería hablar de algo que tanto usted como yo sabemos bien.

Jeon se estremeció ¿acaso se refería a lo que él pensaba?

—Verá— dijo él señorito— Usted vió algo el día de la fiesta que me tiene preocupado.

— Oh, eso... no tiene porqué preocuparse, no le diré a nadie.

—¿en serio? ¡gracias, muchas gracias! — repentinamente Park abrazó al pobre, Jungkook correspondió su abrazó, más se preocupó al oír a su contrario sollozar— ¿Está todo bien señorito Jimin?

— Pensé que me delataría, pensé que sería el fin de lo de él y yo, que todos estos años ocultándonos. se desperdiciarían por un beso.

— ¿Por qué razón habría yo de delatarles? Lo de ustedes es amor, el amor no debería de ser ocultado.

— Usted es un ser muy compresivo, desearía que mi familia fuese así, si ellos tan solo lo supieran...

— No lo harán, el señorito Min y usted  están a salvo. Lo prometo.

Jungkook y Jimin se despidieron amistosamente, ambos se sentían mucho más tranquilos, especialmente el rubio.

Cuando Jungkook volvió, encontró a Taehyung sentado. solo, decidió hacerle compañía y estuvieron la tarde juntos, riendo, bromeando y murmurando, exactamente lo mismo que Kim hizo con la chica unos minutos antes, más había algo diferente cuando ellos lo hacían, la conexión, el amor y sobre todo, la risa de Kim parecía ser mas genuina. 

Mon chérie: mi querido

Burning Love [KTH+JJK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora