Jungkook permanecía a un lado de la ventana, observaba los rayos del sol iluminar todo a su alrededor y los ahora verdes paisajes que deleitaban su vista, otro hombre yacía en las afueras, permanecía hincado mientras regaba aquellas semillas que en un futuro pasarían a ser comida, fruncía la cara de tal forma que el molesto sol en su cara no lo fuese tanto y llenaba la regadera con tal sutileza, no importándole llenar de lodo sus zapatos hechos a medida.
Jungkook rio al ver al hombre caerse y manchar sus pantalones de la húmeda tierra recién mojada, ni en mil años creería que vería a Taehyung haciendo labores mas allá de una oficina y papeles.
Aclaró su garganta cuando esta comenzó a hacer picazón, maldijo por lo bajo al sentir aquella familiar molestia y sacó el pañuelo que se mantenía en su bolsillo, entonces tosió, tosió tan fuerte que su pecho dolió lo suficiente como para sentir que se desgarraba y tan fuerte para que Kim escuchara y corriera cuando se acercaba a casa, ahí permanecía Jeon con un insufrible dolor en el pecho y alguna que otra lágrima formándose en sus ojos debido a la incesable tos, cuando estuvo consciente de que era observado se apresuró a guardar aquel pañuelo blanco que ahora era decorado por manchas rojas.
-¿Por qué me miras así?-cuestionó Jungkook, sintiéndose intimidado ante el intenso mirar ajeno.
-Estoy preocupado-aclaró el pelinegro antes de emprender paso hasta quedar frente a la cara contraria-Deberías descansar ¿porqué no te acuestas un rato? Has estado de pie ya mucho tiempo-dijo dulcemente y sus manos acunaron el rostro ajeno, tomándole con delicadeza como si de un objeto de porcelana se tratase.
-No quiero seguir en esa cama, es tedioso ver el techo todo el día, y pensar en cualquier tontería que venga a mi cabeza.
-Tienes razón, recuerdo ese sentimiento bastante bien...llevar una vida monótona y permanecer en un solo lugar, esperando a que las horas avancen.
-¿tu no te aburres estando acá?
-No realmente, de hecho hago mucho más de lo que me dejarían hacer en casa-sonrió y entonces una idea llegó a su mente- ¿Qué te parece si vamos a caminar? Por acá cerca hay un parque si mi memoria y mi ojo no falla-señaló aquel con el que era capaz de ver, pequeño acto que hizo a Jungkook reír-Ve, ve a cambiarte.
-Pero tus pantalones están sucios, he visto como te has caído.
-Fácilmente me cambio, me pondré alguno de los tuyos, no creo que no me queden.
-No son de la misma calidad ¿Qué tal si la tela te resulta incomoda?
-¡deja de armar tanto lío! Son simples pantalones, ya sé que como son, no es como que no haya sentido esa tela en mis piernas antes-Bromeó y el castaño fingió ignorarlo.
Pasaron minutos hasta que Jeon decidió salir de aquel rincón en donde cambio sus ropas, cualquiera pensaría que se trataba de alguien cuya lentitud para vestirse era extensa mas realmente le tomo pocos segundos estar en las nuevas ropas, en cambio, aquello que le tomo minutos fue encontrar algún pañuelo que no estuviese amarillento o con rastros de la sangre que brotaba de sus pulmones cada vez que tosía, para Taehyung el debía estar perfectamente, como si sus dolores y pesares no existiesen, como si aquellas veces que deseo que sus pulmones dejaran de consumir aire y su sangre dejara de circular no eran mas que bromas que se hacia a si mismo cuando el aburrimiento le ponía harto.
-¡No pensé que tardarías tanto!-vocifero Kim y brinco de la mecedora en que descansaba.
-Me ha tomado un tiempo limpiarme, nada mas.
-Demasiado tiempo diría yo- bromeo mas no ocasiono ninguna gracia en el contrario, pues se mantenía ocupado guardando el único pañuelo presentable que encontró.
Cuando llegaron al lugar fueron capaces de ver a niños correteando por el lugar mientras las que suponían eran sus niñerías les perseguían con desespero, observaron hombres elegantes y mujeres con una sombrilla que combinaba a la perfección con su vestido, algunos iban solos, otros en pareja, algunos atendían en familia e incluso con aquellos pequeños peludos de cuatro patas que se pavoneaban de un lado a otro; ellos en cambio, caminaban a cierta distancia para no hacer notoria la proximidad a la que ambos cuerpos estaban bastante acostumbrados.
Jungkook se detuvo por unos segundos y aclaro su garganta cuando sintió la comezón querer atacar nuevamente, una vez logro controlar aquello camino con rapidez hasta llegar junto a pelinegro,
-Lo siento, me he distraído-sonrió dulcemente y ambos hombres siguieron su ruta.
Cuando volvieron a casa y Kim salió por un momento, Jungkook finalmente fue capaz de dejar salir la tos que contuvo el resto de la tarde, aquella tan dolorosa que ni el fuego sería capaz de quemarlo tanto, posaba una de manos sobre la mesa de noche mientras permanecía de rodillas debido a la continua tos y la pérdida de la fuerza en sus piernas, cuando aquella paró, se apresuró sentarse y tomar aire, estuvo un buen rato observando a través la ventana, preguntándose a si mismo si era su destino cumpliéndose, pues si, tomaba sus medicinas ¿pero realmente servían? ¿Debería de soportar tanto dolor? Tal vez solo sería cosas de unos meses más de tratamientos, meses que para él serían insufribles años.
Sus labios permanecían rojos, sus mejillas se teñían de un carmín que iban a juego con su ahora pálida piel, Jungkook lucía como un ángel, más aquel aspecto era debido a la enfermedad, un ángel cuyo peso era relativamente menor, cuyas manos se mantenían frías a pesar de ser agosto, las bolsas bajo sus ojos demostraban el mal sueño que tenía y el collar colgando en su cuello demostraban una promesa de amor, que nunca se atrevería a romper.
Entonces observó a lo lejos aquella familiar figura, caminaba cabizbajo y parecía limpiar su cara, sus pasos eran cortos, alargando el trayecto hasta la puerta, ¿habría recibido alguna mala noticia de su familia? O ¿por qué lucía tan desanimado luego de llamarlos? Jeon volvió a perderse en sus pensamientos y dio un pequeño brinco cuando escuchó la puerta ser azotada, entonces observó a Taehyung, cuyos labios se mantenían temblorosos, su respiración pesada y sus enrojecidos ojos delataban el reciente llanto de ajeno, ambos se miraron por unos segundos sintiendo curiosidad por el estado del contrario, el silencio fue roto cuando Jungkook habló.
-¿Cómo está tu familia?-cuestionó con naturalidad.
-Bastante bien, supongo-dijo en voz baja-Solo hablé con Jennifer y con...-dudó en decir aquel nombre.
-¿J-jane?-tartamudeó al sentir un nudo en su garganta.
Taehyung asintió-Ella cree que estoy acá por negocios... siempre encuentro alguna forma para mentirle-lamentó.
Jungkook no supo que responder, pues sabía que no estaba bien aquello que hacía, mentirle a su esposa sobre trabajo cuando realmente venía a cuidar de él hacía a Jungkook sentir como si el no fuese más que la causa de los engaños de Taehyung.
Taehyung se acercó a él y se sentó en el suelo apoyando su cabeza sobre las piernas del castaño quien no dudó en acariciar la suave cabellera ajena, ambos permanecieron en silencio, había algo diferente a su ánimo horas antes, ese sentimiento de temor por hablar y enterarse de algo que no querrían.
Si Jeon hablaba se enteraría de aquella noticia que Kim tanto pospuso y si era él quien hablaba primero, su tristeza tan solo aumentaría cuando Jungkook le dijera lo débil que se sentía.
Nadie hablaba, ni los grillos se atrevieron a cantar, la mecedora no rechinaba como de costumbre y el agua puesta en la tetera parecía no calentarse, pues el silbido nunca llegó, más el sollozo de Kim fue el único sonido que resonó en todo el lugar y especialmente en la cabeza de Jungkook.
-¿Por qué lloras, amor mío?
cuestionó el castaño y el que sentía dolor en el pecho lloró aún más fuerte.
-No quiero-balbuceó-No quiero dejarte, no quiero irme de esta manera, prometimos nunca separarnos más y mira que soy yo quien la rompe.
Jungkook no comprendía las intensiones de las palabras ajenas, pero sabía algo, que le dolían como cuchillos que le apuñalaban el corazón.
-Taehyung... ¿De qué hablas?
-Mi familia y yo tomaremos un barco hacia Argentina... el barco sale el lunes, tan solo me quedan cinco días junto a ti y luego, no sabré hasta cuándo podré volver a verte.
(Perdón por actualizar tarde, los quiero mucho gracias por leer)
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Burning Love [KTH+JJK]
FanfictionUn hogar de retiro, un paciente de alzheimer y un libro. En la inglaterra victoriana, Kim Taehyung, un joven de buena familia, dotado de todas las perfecciones posibles, pero ciego, se enamora de Jungkook, un joven pobre y menospreciado por el mundo...