Epílogo.
Quince años después.
Pov Liam.
—Entonces el estúp...
—Lacey no digas groserías.
—Perdón —sus mejillas se ponen rojas y se apresura a seguir hablando—. Bueno que... Jake, me ensucio el uniforme ¡Y a Laney le tiró tierra en el cabello!
Escucho con atención como mi hija de siete años me cuenta lo que le han hecho en la escuela hoy a ella y a su hermana gemela. Me sorprende que con la poca edad que tiene se pueda enojar tanto al punto de tener la cara roja mientras me dice las travesuras del hijo de Sam y John.
—No te preocupes cielo, hablaré con tus tíos para que lo regañen —me pongo de pie, ya que antes estaba de cuclillas para estar a su altura y le beso la frente—. ¿Dónde está tu mamá?
Acabo de llegar de un entrenamiento intenso que me ha dejado exausto, después de tanto pensar y buscar ideas sobre que podía estudiar llegué a la conclusión que lo mío era el fútbol americano y me daba igual lo que pensaran los demás pero yo quería dedicarme a eso. Con mucho esfuerzo obtuve una beca deportiva en la universidad de Crytown y gracias a ello conseguí que las puertas al éxito de ese deporte se abrieran para mí y aquí me encuentro siendo jugador de uno de los mejores equipos del país.
—Esta en la cocina con Laney —un mechón de cabello castaño le cae en la cara y se lo echa hacia atrás con mucha delicadeza, sus ojos azules como los míos me examinan el rostro—. Mamá dijo que llegarías cansado —me toma la mano arrastrándome a la cocina—. Así que nos hemos pasado tooooda la tarde preparándote tu comida favorita, a mamá se le quemó el arroz varias veces ¡Pero no le digas que yo te conté!
Sonrío sin poder evitarlo mientras camino a su lado. Luna a diferencia de mi no es una gran cocinera pero la verdad es que agradezco el esfuerzo y su comida al menos es comestible y no corres el riesgo de morir intoxicado.
Cuando llegamos a dónde se encuentran las otras dos mujeres de mi vida el olor a quemado me llega pero finjo que no lo noto y me acerco a Laney para darle un beso en la frente, ella me sonríe y ya que mi esposa no se ha dado cuenta de mi presencia me acerco abrazándola por detrás y dejo un beso en su hombro.
—Hola —se da la vuelta sonriendo y me da un casto beso en los labios.
—Eeww, Laney tápate los ojos papá y mamá están compartiendo gérmenes otra vez.
Lacey corre hasta su hermana quien chilla ante el impacto de la mano de su gemela en sus ojos. Niego con la cabeza recordando el día en que Evan con su inmensa sabiduría le dijo a las niñas que era lo que Luna y yo hacíamos cada vez que pegabamos los labios y su maravillosa explicacion fue:
—Comparten gérmenes cariño y si los miras por mucho tiempo mientras lo hacen te quedarás ciega.
Si, no es precisamente el mejor tío del mundo explicando cosas pero al menos las conciente, las trata bien y que yo sepa no le ha dicho ninguna otra cosa estúpida.
Acaricio el vientre de Luna por encima del vestido floreado que lleva. Tiene tres meses de embarazo y aún su panza de embarazada no es muy visible pero aún así me gusta pasar mi mano por ella y saber que algo hecho por los dos está dentro de su vientre.
Me pongo en cuclillas otra vez quedando mi rostro en la misma altura que su estómago.
—Hola pequeño Lenny.
—Y aquí vamos otra vez —la escucho decir a ella con exasperacion.
—Papá ¿Que estás haciendo? —la voz dulce de Laney hace que me gire a mirarla.
ESTÁS LEYENDO
Siempre Tú ✔️
Teen FictionQuizas ellos estan destinados, o quizas no. Tantos años han pasado y no resulta creible que no hayan tenido ningun contacto a pesar de estar tan cerca pero a la vez tan lejos, como si fueran kilometros los que los separaran cuando en realidad son so...