Capitulo 58

7.5K 414 10
                                    

Gregory

Hacer el amor con mi mujer es lo mejor, algo puro que nos une, no es sexo es amor del bueno.

Estaba realmente feliz, muy feliz la mujer que amo me dijo que si ahora debía organizar la boda no quería esperar.

Era como un sueño despertar con ella y entre mis brazos solo que  ahora con un anillo en su dedo, el anillo que simboliza nuestro compromiso de amor puro listo para formar una familia.

Si mis padres están dispuestos a aceptarlo ya no es mi prioridad pensar en el que dirán, llegando a Londres renunciaría a la dirección del Hospital, para solo pasar a ser socio debía mantenerme al margen , mis objetivos ahora cambiaban al unirme a los Bianchi.

Iba a iniciar una vida con mi mujer, tendríamos hijos por lo que debo tenerla segura.

Incluirme en los negocios de mi ahora suegro no me asustan haría lo que fuera por mi Fiore, ahuyentaré a todo lobo que se acerque a mi oveja, seré el que protege su madriguera.

Es hermosa, no me cansaré de amarla, su mala experiencia no se repetirá y eso de mi cuenta corre, tonto fue aquel que la dejo por estupideces y lujuria, pero no hay mal que por bien no venga, él perdió y yo gane, dicen que para uno es basura para otros es tesoro y mi Fiorella es mi mayor tesoro.

- ¿En qué piensas?

-En ti bonita, en nuestra vida.

-Debemos decirle a papá.

-Valentino lo sabe, ¿crees que lo hubiera hecho si no tuviera su bendición?

- ¡En verdad! Gregory eso es un gran detalle.

-No te separaras de tu familia amor mío se lo importante que eres para ellos por lo que nos casaremos en Italia y viviremos en Italia.

- ¿En serio? - asisto.

-O si quieres vamos ahora mismo al registros civil y nos casamos.

- Sabes me quiero casar contigo junto a mi familia y tu familia si así lo quieran podrían ir, quiero algo chico pero bonito no tengo un mundo de amistades, así que no le veo el caso de invitar a tanta gente.

-Lo que tú digas tus deseos son ordenes mi amor - la beso - pero usaras un hermoso vestido y ya que estamos en New York puedes pasar a la tienda de novias y ver si algo te gusta, también está la opción de mandártelo hacer con algún diseñador.

-No, mejor voy a la tienda, llevo a Alessia y a Laura ellas pueden darme una buena opinión.

-Lo que tú digas amor mío, mientras tanto sigamos festejando - levanto el edredón para ponerme sobre ella, comenzamos a besarnos, le beso el cuello mientras me acomodo entre sus piernas y masajeo sus senos, esos senos que llenan mis manos y que alimentaran a mis hijos, con suerte pronto tendremos noticias, no he usado preservativo me gusta sentir su humedad, sus orgasmos y amarla sin barreras.

¡ha! Gime cuando la penetro, eleva sus piernas  enrollándolas en mi cadera   para darme mejor entrada, la embisto mientras la lleno de besos - oh Dios Gregory más rápido.

- ¿Te gusta?

-Si... si... me gusta.

-Siempre mías mi mujer, te haré el amor cada mañana, cada vez que me lo pidas, al irte a dormir te haré el amor, en la cocina, en la ducha, en el auto donde quieras amor mío, solo pídemelo.

Continúo embistiéndola, hago movimientos circulares frotando mi pelvis con su clítoris para brindarle más placer, cosa que consigo porque gime totalmente extasiada, sus mejillas se tornan rojas, siento sus uñas clavarse en mi espalda no me importa tener arañazos se sujeta a mi como un salva vidas, además es señal de que está por llegar y que lo está disfrutando.

TE OLVIDAREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora