LA CARTA

2.4K 228 32
                                    

Temía que esto sucediera. Lo temía, pero igual lo esperaba.

Estaba acostumbrado, o más bien resignado, a que las personas que pasaban por mi vida, tarde o temprano se fueran, y ni siquiera me importaba, porque creía que una persona con el estilo de vida como el mío, simplemente no había sido diseñado para sostener relaciones duraderas. No me interesaba que me conocieran, porque cuando no te conoces ni a ti mismo, crees que no tienes nada que mostrar, y por lo mismo, no me interesaba conocer a alguien más.

Eso fue así, hasta el día en que regresé a tu casa y te vi. Lo hice de una forma en que no lo había hecho antes, y eso fue completamente confuso.

No alcanzas a imaginar la lucha que he librado desde ese día entre lo que debería sentir, y lo que en realidad siento.

He intentado acercarme a ti, porque quería ayudarte de alguna manera y acompañarte en todo el drama que estás viviendo, y es que sé lo que se siente, porque también lo he vivido.

De cierta forma quería compensarte, porque cuando estoy cerca de ti, es como si todo fuese más fácil de llevar. Y pretendía que pudieses llegar a sentir eso también.

Aunque sé que crees que no, nunca has dejado de tener esa luz que ilumina todo lo que hay a tu alrededor, y así entendí por qué Louis te dice Lucecilla. Creo que él no se equivoca.

Te admiro. No sabes cuánto lo hago. Eres una persona fuerte, que ha tenido que hacer frente a muchas batallas, y aun así sigues regalándoles sonrisas a los demás. Te has mantenido de pie, sin importar cuantas veces hallan intentado derribarte, y eso solo es una de las variadas razones por las que me siento orgulloso de quien eres ahora.

Lamento haber sido un idiota, pero no estaba preparado para todo lo que traerías contigo al entrar a mi vida. Dudo que alguien esté preparado para ti realmente, porque arrollas todo lo que encuentras a tu paso, y le das un nuevo sentido a las cosas con esa luz y emoción que transmiten esos hermosos ojos.

Eres tres mil cosas juntas, y todas me gustan.

Nunca había conocido a alguien que me hiciera sentir la cantidad de cosas que siento cuando estoy contigo y eso es completamente aterrador y fascinante, pero debo ser honesto en todo sentido.

Tengo muchas cosas por aprender, y aunque quiero hacerlo contigo, sé que mereces más que alguien que no sabe ni como expresarse.

No quiero ser una carga o problema más, y por eso me alejé. Creí que eso era lo mejor para ti, aunque siento que tú eres lo mejor para mí; probablemente esté siendo egoísta al acercarme de nuevo, pero creo que mereces respuestas y para eso es esta carta.

Quiero aprender a quererte, conocerte y conocerme, si así me lo permites.

Me disculpo porque sé que te dije que no me iría, pero lo hice. Sé que te herí, y lo lamento como no te imaginas, pero supongo que te has convertido en un imán, al que inevitablemente voy a querer ser atraído.

Mereces más de lo que puedo ofrecerte, pero te ofrezco todo lo que tengo ahora. 

A donde sea, pero si estás túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora