Maratón 1/?
𝑆𝑒𝑏𝑎𝑠𝑡𝑖𝑎́𝑛.
Hace ya algunos días que estábamos en casa y nunca pensé que ser padre fuese tan difícil.El reloj marcaba las dos de la mañana y los bebés estaban despiertos mientras Lidia les daba pecho a ambos. Claramente yo estaba despierto para apoyarla por si necesitaba algo.
Los directivos del club habían sido amables conmigo y cuando se enteraron del nacimiento de mis hijos, no dudaron en darme algunos días libres para estar con ellos y con Lidia.
Noté que ella estaba ida desde que llegamos del hospital. La noticia de su padre le había dejado una enorme preocupación y yo podía ver cómo le afectaba.
Su cabeza estaba apoyada en la cabecera de la cama y unas almohadas estaban a sus costados, apoyando sus brazos para que no se le cansaran por el peso de los bebés.
Yo estaba tumbado de lado, mi cabeza mirando en dirección a Lidia, quien después de unos minutos, se dio cuenta que la estaba mirando.
—¿Me hablaste? —soltó despistada.
—No, sólo te observo.
—¿Por qué haces eso? —preguntó riendo por lo bajo, mientras sus mejillas se teñían de rojo.
—Estoy tratando de saber en qué piensas. —confesé.
Lidia soltó un suspiro profundo y atrapó la manita de Alessandro, quien la alzó como si estuviese buscando algo.
—En mi papá. —soltó en un hilo de voz. —Él dice que está bien, pero sus ojos no decían lo mismo.
Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas y se mordió el labio para evitar sollozar y despertar a los bebés.
—Deben ser las quimioterapias, se sabe que te consumen mucho. —estiré mi mano para limpiar una pequeña lágrima que bajaba por su mejilla.
Lidia me sonrió en forma de agradecimiento y besó mis nudillos.
—Debe ser eso. —me dijo más tranquila, pero algo en su rostro me decía que estaba pensando en algo más.
—¿Pasa algo más? Sabes que puedes decirme, así buscamos una solución. —le hice saber.
—Solo... Me siento mal por no estar con él para ayudarlo, pero también me duele no apoyar a mi mamá. Debe de estar sintiéndose mal emocionalmente por que todo lo que está haciendo sola. —sus dedos jugaban con el gorrito de los bebés, como queriendo decir algo pero a la vez dudando.
—Quieres viajar para México, ¿no? —solté y ella me miró. Había acertado lo que pensaba.
—Lo pensé, pero no creo que sea lo más conveniente. Los bebés acaban de nacer y yo necesito recuperarme del parto. —guardó silencio por unos segundos y después continuó. —Además el trámite para el pasaporte de los bebés es tardado.
La miré por unos segundos, tratando de hayar una manera de ayudarla, pero por ahora no había algo que yo pudiera hacer. Estábamos en Alemania y por ahora mi trabajo no me permitía viajar.
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𝑬𝒕𝒆𝒓𝒏𝒂𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆 ➳𝑺𝒆𝒃𝒂𝒔𝒕𝒊𝒂́𝒏 𝑪𝒐́𝒓𝒅𝒐𝒗𝒂 #𝟐
FanfictionTe daré amor en la otra vida, en esta no me alcanzaron los años. 𝐒𝐞𝐠𝐮𝐧𝐝𝐚 𝐭𝐞𝐦𝐩𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚 𝐝𝐞 ¿𝐃𝐨́𝐧𝐝𝐞 𝐄𝐬𝐭𝐚𝐛𝐚𝐬? 𝐏𝐫𝐢𝐦𝐞𝐫𝐚 𝐭𝐞𝐦𝐩𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚 𝐝𝐢𝐬𝐩𝐨𝐧𝐢𝐛𝐥𝐞 𝐞𝐧 𝐦𝐢 𝐩𝐞𝐫𝐟𝐢𝐥.