Mi Secreta Debilidad © ✔︎ {+18} [ 𝑁𝑢𝑒𝑣𝑎 𝑉𝑒𝑟𝑠𝑖𝑜́𝑛✨]

4. 𝐶𝑂𝑁𝑇𝑅𝐴𝐴𝑇𝐴𝑄𝑈𝐸 ✔︎

«Ese secreto acabará explotándote en la cara, y puede que yo me encargue de eso»—Mar, 26 oct 7:58 AM

Fue el mensaje que recibí cuando me levanté esta mañana. Darien estaba intentando intimidarme, estaba segura de que se trataba de él. Por mucho que lo negara, era la única persona que sabía sobre lo que iba a hacer ayer por la tarde.

Ayer mi tarde fue interrumpida por mis padres. Pude apartarme a tiempo. Tuve demasiada suerte. No acabamos la clase, nos sentíamos algo incomodos por no poder terminar. Así que se fue enseguida. Y viendo este mensaje, puede que haya sido lo mejor. No quiero ni imaginarme que hubiera pasado si nos hubiéramos acostado. Quizá hubiera tomado fotos o grabado un video sobre ello y no me sorprendería.

Solo sería la punta del iceberg y la verdad, lo había pasado peor el año pasado.

Soltando un suspiro, reuní las fuerzas suficientes para levantarme y prepararme para asistir al instituto. Eligiendo la ropa más simple y con un gran moño de total despeinado, me dirigí escaleras abajo para escoger mi desayuno con total tranquilidad. Suelo maquillarme también pero esta vez la vida no me daba para más.

Baje con toda la tranquilidad del mundo, pues Brisa se encontraba en su piso y mis padres siempre solían irse a trabajar antes de levantarme. También estaba tranquila porque necesitaba cambiar la mentalidad que había tenido durante estos meses. Me la pasaba estresada y alerta. Nerviosa, horrible. Esta vez intentaba olvidar el hecho de que Darien estaba chantajeándome. Y que yo aún no tenía nada.

Divise al cartero desde el gran ventanal que teníamos en la cocina. Cuando se fue, me dirigí al buzón. Rápidamente porque había un frío increíble. Me ofrecí a recoger el correo, porque esperaba una carta muy importante. Revolví todo el correo basura que había encima y encontré un sobre. Pero no se trataba del que yo estaba esperando. Era un sobre azul. Con mi nombre en grande.

Me pareció curioso. Y confuso sobretodo. Lo rasgué por la parte superior y saqué el contenido de dentro. No era una carta, se trataba de una foto. Y la foto revelada era de Elliot y yo besándonos ayer. Dios mío, está era la gota que colmaba el vaso. ¿De verdad jamas iba a ser libre? Los chantajes no cesaban.

Se me ocurrió girar la foto.

«Tengo material suficiente, no te molestes en romperla, es una de muchas, ¿Continuarás colaborando?»—se encontraba escrito en grande. ¿Acaso me encontraba en un episodio de Gossip girl o de PLL? Maldita sea Darien.

El sonido de la cerradura retorcerse detrás de mi interrumpió mis pensamientos. Lo que me propició a esconder la foto rápidamente en el sobre y a girarme.

-¿Que estás haciendo?—dijo Brisa mirándome extrañada. Escondí el sobre detrás de mi espalda.

-¿Que estás haciendo aquí?—pregunté para disipar la pregunta—¿No tendrías que estar en la universidad?

-¿Es que ahora eres mamá? Las clases las tengo más tarde. He venido por un par de cosas que necesito y otras más que me dejé aquí—dijo dejando su bolso en la silla que se encontraba al lado de la encimera—Es tarde, ¿No tendrías que estar vestida? Qué haces aún en pijama.

-Estoy vestida—dije con una mueca.

-Pues...¡Iugh!—exclamó con desagrado—Yo me pondría al menos un poco de maquillaje. Desde aquí pareces la novia del vagabundo que se encuentra dormido en el césped del parque de enfrente.

-Ya, lo que tú digas—dije ignorándola totalmente y yendo hacia la nevera, me metí el sobre en el bolsillo, arrugando la foto por supuesto. Tampoco me interesaba mantenerla intacta.