Mi Secreta Debilidad © ✔︎ {+18} [ 𝑁𝑢𝑒𝑣𝑎 𝑉𝑒𝑟𝑠𝑖𝑜́𝑛✨]

19. 𝑆𝑇𝐸𝐹𝐴𝑁𝑁𝑌, 𝑁𝑂 𝑇𝐸 𝑀𝐸𝑅𝐸𝑍𝐶𝑂 ✔︎

—Amor, ¿Te pasa algo conmigo?—me preguntó Fanny mientras bebía de su café.

Estuve la mayoría de la tarde en mi habitación, llorando. Odiando mi vida y a mí misma por completo. Con las persianas bajadas y las cortinas cerradas. Ni siquiera dejé entrar a la maldita de Brisa. Quería cotillear sobre mi vida ahora que la suya ya estaba "arreglada". No me había arreglado mucho para venir. Vine obligada. Fanny me llamó como a las siete y media de la tarde para tomar un café. Pues la había evitado en el instituto descaradamente.

Intenté negarme pero cuando Fanny quería algo, lo conseguía y realmente resistirse no iba a dar resultado. Así que le hice caso. Me despojé del pijama tan apestoso que llevaba y me puse unas mallas, además de una sudadera bastante grande. Ni siquiera me retoqué el maquillaje que había llevado a la escuela. Me lo quité entero y así me presenté enfrente de ella. Sabía que no estaba bien por las pintas que llevaba. Mínimo me suelo peinar un poco. O me pongo perfume. Pero llevaba en la cama todo el día, comiendo trozos de pizza que sobraron de la semana pasada. O la anterior...comenzaba a sentirme rara del estómago.

—No...no es contigo Fanny—dije algo decaída y bebiendo un sorbo del café—Me quiero ir a casa y no salir nunca de mi habitación.

—¿Pero qué te ha ocurrido?—preguntó—Jamás te había visto así.

—Estoy estresada por la escuela, nada más—dije despacio.

—¿Te dejó?—preguntó—¿Algo pasó entre tú hombre misterioso y tú? Te juro que si te hizo algo...

—No, no—dije—Solo estoy estresada y...

—Sé que no solo se trata de eso. Te lo voy a sonsacar, ya sabes que siempre lo hago—dijo—Pero antes, necesito contarte las cosas que han estado pasando, mi vida.

—Soy toda oídos—dije mientras miraba a la nada y con poca actitud.

Fanny entrecerró los ojos. Sabía que no estaba de humor. Pero de igual forma iba a contármelo. Me divertía mucho su forma de ser. La verdad, no sabría qué hacer si algún día se enteraba de lo que había hecho.

—En mi casa se montó la de dios—comenzó—Mientras Gabe y yo estábamos haciendo el trabajo, papá encontró un tanga en su despacho, cerca de su escritorio. Vino a preguntarme por eso. Delante del idiota de Gabe. Pero no era mío. Encima estaba roto. Por lo que prácticamente me descartaron y pensaron en Darien. No sé cuánto lleva ahí, pero estaba bastante oculto. Puede que sea de tu hermana o alguien más que haya traído mi hermano. En tal caso, mi padre va a matar a Darien por follar encima de sus archivos. ¿A que es asqueroso?

Me quedé sin habla. Cada vez se me hacía más extraño que Fanny no sumara dos más dos. A ella ni siquiera se le pasaba por la cabeza que yo podría estar follando con Darien. Tiene asumido totalmente que jamás se fijaría en mí y que tampoco sucedería de manera inversa.

—Si...—dije despacio y bajando la mirada a mi café—¿Que...qué pasó con él?

—Oh, creo que Liana lo tiró. Mi padre está furioso. Cree que puede haber semen en su escritorio y mandó a Liana a desinfectar todo su despacho a fondo. Tiene ganas de matar a Darien. No se que le irá a hacer esta vez...

De repente cambié mi expresión. Sabía que Darien era un idiota. Y que realmente se merecía cualquier cosa. Pero gracias a Grey ya sabía más o menos su historia con su familia y me aterraba la idea de que de verdad pudiera hacerle daño.

—Y...la segunda cosa que me ha pasado es que puede que me haya...liado con Gabe un poco—soltó rápidamente y comenzó a sorber de su café.

—¡¿Cómo?!—pregunté sorprendida.