El loto de los Wen

Despierta.

  Desorientado, el jade despierta de un sobre salto - ¡tranquilo...! - dice en tono suave y dulce el Wen, en lo que acaricia la cabeza de su esposo - ¡todo esta bien!- le besa la mano que le ha sostenido por un buen rato.

- ¿cuanto tiempo he dormido? - pregunta el jade, aun acostado pero sin quitar la mirada de su esposo que le mira con profundo amor.

- desde ayer en la tarde, ya es más de medio día.

- como esta mi bebé... - pregunta tocando su vientre.

- nuestro bebé es muy fuerte y muy saludable.

- ¡mi tío....! - exclama con tristeza el jade.

- tu tío..... - el Wen guarda silencio y solo se queda viendo por un largo momento. Ese viejo es un mal nacido que causo mucho daño y dolor, pero fue un padre para su esposo y aunque no lo entienda A'huan lo quiere a pesar de todo. No sabe como darle la noticia, no quiere verlo llorar una vez más a causa de ese viejo miserable.

- A'cheng, esta muerto ¿cierto? - el Wen no sabe como responder, pero tampoco puede decir que se sentaron a tomar el té y arreglaron sus diferencias y que ahora son amigos - ¿cierto....?- A'cheng solo baja la mirada.

- ¿quién fue....?

- ¡eso no importa!

- ¡a mi, si....! - insiste el jade tomando el rostro de su esposo con ambas manos - ¡dime...!

- fue A'yuan.... - el jade solo cerro sus ojos dejando sus lágrimas caer.

- quiero verlo...-  pide con la voz quebrada.

- ¡A'huan...! - suspira con pesar - no quedo nada - entonces el jade comprendió.

- ¿cómo...?

- ¡no es necesario que lo sepas!

- tengo que saberlo para poder estar tranquilo, si no, no podre vivir en paz.

- tu tío ataco con energía resentida, tenía los amuletos Yin.... A'yuan destruyo las piezas y uso su cultivo demoníaco para atacarlo y luego dejo que los perros se lo comieran..... no quedo nada.

- es mi hija ¡¿no puedo enojarme con ella?! ¡tampoco odiarla por lo que hizo! - aprieta la mano de su esposo - ella solo quiere proteger a su familia, no quiere que nadie nos lastime -  con el dolor de su corazón, el jade busca las palabras para justificar a su hija con respecto a lo que hizo, al gran pecado que cometió - ella nos ama.

- si, esa es su forma de desmostar su amor, "protegiendo a su familia" - dice ZhuoCheng sabiendo exactamente lo que su esposo necesita escuchar, para tener una fiable razón para no odiar a su hija por haber matado a quien fue su figura paterna.  

Los días pasan y A'huan aun no es capaz de mirar a su hija y no es que este enojado, si no que es por un sentimiento que no cree por el cual A'yuan pueda sentir empatía, después de todo fue ella quien mato a su tío, incluso, hasta de si mismo siente que esta loco por sentir la muerte de alguien como ese hombre que la mayor parte de su vida no le demostró amor, ¿pero qué puede esperar? Después de todo aparte de su hermano era su única figura paterna a quien se aferro por muchos años.

A'huan esta sentado frente al estanque que su esposo le regalo, sumergido en sus pensamientos.

- ¿me odias? - pregunta A'yuan interrumpiendo a su padre.

- ¡no, no te odio! - sonríe - ¿quién odiaría a esta linda jovencita?- le toma de la mano.

- ¿me perdonas....? - insiste la joven.

- tú sabes por que haces las cosas - le acaricia el rostro a su pequeña - no te arrepientas, eres una gran persona... ¡no existe nada injustificado que yo considere deba perdonar en ti!.